La alcaldesa, Mamen Sánchez, junto al delegado de Deportes y Medio Rural, Jesús Alba, ha recibido en el Ayuntamiento al jerezano Juan Antonio Pina, que se ha proclamado dos veces campeón de España de Billar, la primera en 2018 en la modalidad de Bola 8 y la más reciente en el Campeonato de España celebrado en Campello (Alicante) del 7 al 13 de junio, evento en el que se hizo con el título en las modalidades de Bola 9, Bola 10 y por selecciones, siendo quinto clasificado en Bola 8.

La alcaldesa ha felicitado a Juan Antonio Pina "por su constancia y pasión hacia una modalidad deportiva tan técnica y que exige tanta concentración, mentalidad ganadora y preparación" y ha añadido que "es una gran satisfacción comprobar cómo Jerez se promociona en positivo a través también de disciplinas como el billar, que no tienen tanta visibilidad mediática como otras, pero que ponen a Jerez presente en distintos campeonatos nacionales e internacionales".

Igualmente, Mamen Sánchez ha subrayado "el esfuerzo que hace a diario Juan Antonio Pina para seguir en la línea ganadora ya que, sin dedicarse profesionalmente al billar, como sus principales rivales, ha sido dos veces campeón de España y, en la última edición, en tres modalidades, preparándose al mismo tiempo que compagina su actividad profesional".

Pina ha roto la hegemonía que mantenían en el Campeonato de España en la última década David Alcaide, Francisco Díaz y Francisco Sánchez, ganadores de manera alterna de tal evento, salvo en las referidas ediciones de 2018 y 2021.

Pina, un ejemplo 

Los citados jugadores son compañeros de selección española del jerezano, de 36 años, que se proclamó junto a ellos campeón de Europa en la Eurocopa disputada en Treviso (Italia) en mayo de 2019 y se hallan entre los cinco mejores billaristas del continente. Alcaide, Díaz y Sánchez son jugadores profesionales que militan en el Ecotisa Salamanca.

Pina se dedica al billar por hobby, que compagina con su profesión como responsable del Grupo GESFOR. "A diferencia de mis rivales y compañeros en la selección, debo compaginar mi vida laboral con mi pasión por el billar. Entreno en una mesa de competición en casa a primerísima hora antes de empezar la jornada laboral, no tengo 'coach' ni entreno jugando contra otros billaristas, y fui a los torneos para participar sin mayores objetivos y conocer ciudades de paso, los resultados han llegado y estoy realmente contento de poder representar a través de ellos a mi ciudad".