Programación Guía de la Feria de Jerez 2024

Lorena Trujillano

"Mi sueño es estar en un Mundial"

Lorena Trujillano, árbitra jerezana de Primera RFEF femenina y Tercera RFEF masculina. Lorena Trujillano, árbitra jerezana de Primera RFEF femenina y Tercera RFEF masculina.

Lorena Trujillano, árbitra jerezana de Primera RFEF femenina y Tercera RFEF masculina. / Miguel Ángel González

Escrito por

D. Sánchez

El fútbol femenino en España ha crecido de forma exponencial en los últimos años, un trabajo que se lleva realizando desde la base con las selecciones de categorías inferiores y que ha alcanzado la cúspide hace apenas unas semanas con la consecución del Mundial absoluto logrado en Australia. Poco a poco se han ido rompiendo barreras y 'techos de cristal' y aunque todavía queda mucho camino por recorrer, lejos queda ya el casposo lema del 'fútbol es cosa de hombres'.

Ese crecimiento se ha dado en todos los estamentos: jugadoras, cuerpos técnicos y también en el arbitraje, donde cada vez es más frecuente ver a mujeres como asistentes de banda y como árbitras principales. Una de las de mayor proyección es Lorena Trujillano Gallardo, tinerfeña de nacimiento y jerezana de adopción, la primera mujer de Andalucía en ascender a Tercera RFEF la pasada temporada, en la que pitó 8 encuentros, asistente en Segunda RFEF masculina, árbitra principal en la Primera RFEF femenina -la segunda categoría en importancia- y cuarta en Primera División femenina. La pasada semana dirigió el Puente Genil-La Palma del Grupo X de Tercera RFEF, pitó igualmente el Madrid B-Aem SE de Primera RFEF femenina y este domingo va de asistente en el Vélez-Antoniano de Segunda RFEF.

"Conmigo se puede dialogar hasta cierto punto, porque hay momentos de un partido en el que tienes que ser taxativa para marcar los límites"

Lorena se quedó la pasada temporada a las puertas del ascenso a la Primera Iberdrola, que volverá a intentar este año porque lo tiene clarísimo: "Mi objetivo es llegar alto y mi sueño, el de cualquier árbitro, estar en un Mundial, como hemos tenido a Marta Huertas, que es mi referente, en el Mundial femenino este año. Es difícil, porque compites contra muchos compañeros, gente muy preparada, pero todo es trabajarlo".

Lorena Trujillano, en la sala ArteaDiario de Diario de Jerez. Lorena Trujillano, en la sala ArteaDiario de Diario de Jerez.

Lorena Trujillano, en la sala ArteaDiario de Diario de Jerez. / Miguel Ángel González

Inicios

Entrenadora en un gimnasio y con estudios de Criminología, la jerezana llegó al mundo del arbitraje por un amigo también colegiado: "Siempre me ha gustado el fútbol, jugué un año en el Xerez Balompié, pero sufrí un accidente y me fastidié la espalda. Un amigo me comentó que probara y aunque en un principio era reticente simplemente por el hecho de los insultos, probé y ésta es mi séptima temporada". Años después, no se arrepiente, todo lo contrario: "La mejor decisión fue coger el arbitraje, son dos perspectivas diferentes y de la que disfruto es con el arbitraje, tampoco era muy buena jugando al fútbol (risas). La gente me pregunta de qué equipo soy, y no soy de ninguno, lo veo desde otra perspectiva, cuando me siento a ver un partido de fútbol yo presto atención al árbitro del centro, a ver qué puedes coger de él, lo que te gusta y lo que no y vas aprendiendo de todos porque cada árbitro tiene su propia personalidad, de ahí sale tu propio estilo".

"Este mundo siempre se ha visto como un deporte de hombres y también hay chicas que disfrutamos del fútbol, vamos rompiendo barreras"

La pasada semana dirigió con buena nota el Puente Genil-La Palma y asegura que los clubes ya están asimilando que les pueden pitar árbitras en algunas jornadas. "El trato es igual que al resto de compañeros, no noto diferencias, creo que en eso hemos avanzado bastante porque cade vez es más común. Tenemos árbitras en Primera y Segunda RFEF, vamos evolucionando y rompiendo barreras porque el mundo del fútbol siempre se ha visto como un deporte de hombres y realmente no es así, también hay chicas que disfrutamos del fútbol".

Como colegiada, apunta que "hay que tener mucha empatía, cada partido es un mundo y hay que gestionarlo de forma diferente" y considera que "conmigo se puede dialogar hasta cierto punto, porque hay momentos de un partido en el que tienes que ser taxativa para marcar los límites con los jugadores y el cuerpo técnico. Si al final eres un árbitro permisivo, a la primera te la van a dar, cien por cien. Hay que marcar límites, que haya un espacio entre jugador y árbitro".

"Lo mejor de ser árbitra es viajar, tener nuevas experiencias, hacer equipo con tus compañeros... y lo peor cuando cometes un error, te lo llevas a casa y pasas una mala semana"

¿Cómo prepara los partidos?

"Estudio a los equipos, vemos sus encuentros, cuáles son las jugadoras importantes, cómo se portan los banquillos, quiénes son los entrenadores o entrenadoras, lo miramos todo. Yo preparo un powerpoint con diapositivas y voy comentándole a los compañeras dónde hay que tener más cuidado, las jugadoras que más influencia tienen, los lances de juego que se pueden producir. Al fin y al cabo es estudiar cómo juegan los equipos para llegar al partido con una idea. Y ellos también te estudian, como anécdota, llegué a un campo de fútbol en Tercera y me encontré mi foto con cosas apuntadas en el vestuario (risas)".

El mundo del arbitraje tiene aspectos positivos y negativos. "Lo mejor es poder viajar, conocer, tener nuevas experiencias, hacer equipo con tus compañeros, eso es lo que te llevas, sales de un partido y si ha ido muy bien lo disfrutas. También disfrutas de la preparación del partido, te encuentras con colegiados que tienen que pitar otros partidos y los puedes conocer. El año pasado pudimos ir al Oviedo-Sporting en el Carlos Tartiere y el ambiente era espectacular".

La árbitra jerezana aspira este año a ascender a Segunda RFEF. La árbitra jerezana aspira este año a ascender a Segunda RFEF.

La árbitra jerezana aspira este año a ascender a Segunda RFEF. / Miguel Ángel González

Por contra, "cuando fallas, el error te lo llevas a casa. Vemos nuestros partidos, lo analizamos todo, lo que has acertado pero también en qué has fallado y cuando te llevas a casa un error pasas una mala semana, es la parte más difícil del arbitraje. Somos humanos, pero no deja de ser un error haciendo tu trabajo, puedes tener un partido lleno de decisiones buenas, pero si hay una en la que te equivocas y que sea decisiva... Y hay que trabajar en eso para ver cómo no volver a fallar en lo mismo".

Gestión

En lo mental también es "difícil de gestionar, pero la Federación nos pone un psicólogo deportivo que nos hace ver que el error es humano y que en el arbitraje tienes que tomar una decisión en milésimas de segundo y hay que ser conscientes de que vas a fallar en un partido y también en el siguiente porque así es el arbitraje, lo importante es aprender de esos errores para no cometerlos más".

Un mal endémico en el fútbol, al menos en el masculino, es la cantidad de insultos que reciben los árbitros. Lorena apunta que "por ser mujer no he sufrido más insultos que mis compañeros". Reconoce que "el insulto fácil hacia una mujer es el machista, pero mis compañeros los reciben también. Hacemos oídos sordos y además estamos tan concentrados en hacerlo bien, en el partido, en lo que te está diciendo el compañero por el pinganillo, que hay muchas veces que no escuchas nada de fuera”.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios