Martel vuelve al Guada, que no prevé salidas

El Guadalcacín, líder de la Primera Andaluza, se ha reforzado esta semana con el centrocampista jerezano Álvaro Martel, procedente de la Balompédica Lebrijana. El atacante, que puede actuar en cualquiera de las tres mediaspuntas e incluso como hombre más adelantado, llega para reforzar una línea de ataque ya de por sí potente con hombres como Javi Tamayo, Luisma, Alberto Piñero, Mendoza y Juanma Carrasco, aunque este último está jugando últimamente en el lateral zurdo.

Martel ha tenido poco protagonismo en la Lebrijana. Obtuvo el pasado martes su carta de libertad pagando los 100 euros de la mutualidad -algo que se está poniendo de moda en las últimas fechas- y devolviendo todo el material deportivo que le facilitaron a principios de la pretemporada: "No he tenido mucha suerte allí, el entrenador ha preferido contar con otros compañeros antes que conmigo y cuando llegó la llamada del Guadalcacín no me lo pensé dos veces".

Pretendido también por el Jerez Industrial, Martel ha preferido regresar al Guada por dos factores: primero, la clasificación del equipo; y segundo, y quizá lo más importante "porque el Guadalcacín fue el primer equipo sénior que confió en mí y yo me siento del Guadalcacín". En efecto, tras salir del San Benito, Martel recaló en el Guada el año del ascenso a la Primera Andaluza de la mano de Juan Carlos Ramírez, aunque su mejor año fue el siguiente, el primero en la nueva categoría, que le abrió las puertas del Xerez Deportivo B, equipo en el que militó la pasada temporada con sabor agridulce, ya que empezó jugando y luego entró en una etapa de ostracismo al margen de que el club se quedó a las puertas del ascenso. "Soy el mismo que se marchó de Guadalcacín hace año y medio, yo al menos me veo así. En la Lebrijana no me han dado bola y la experiencia no ha sido buena aunque de todo se aprende y seguro que me va a servir. El año pasado en el Xerez B jugué más aunque no todo lo que yo quise". Preguntado por si su rendimiento ha bajado confiesa que "no creo que sea eso pero sí es verdad que me considero un jugador de esos que a lo mejor necesita más atención por parte del cuerpo técnico. No todos los futbolistas somos iguales y unos necesitan más cariño que otros".

Martel espera reverdecer sus buenas actuaciones con el nuevo Guadalcacín aunque reconoce que no será fácil entrar en el equipo porque "está como un tiro, aunque siempre es más fácil adaptarte a un grupo donde todo va sobre ruedas".

El mediapunta, que ayer se entrenó por primera vez con sus compañeros y que ya tiene su ficha diligenciada, está listo para debutar el domingo, aunque sea entrando en la convocatoria, cosa plausible debido a las bajas que arrastra el equipo del partido del pasado domingo: "Yo me veo bien aunque supongo que hasta que no te metes en un partido no sabes de verdad a qué nivel estás".

Bajar a Primera Andaluza no es un paso atrás después de su experiencia en Lebrija: "El fútbol está muy mal. Allí empezaron pagando por victoria y empate y, finalmente, sólo si entrabas en la convocatoria. Vuelvo a Guadalcacín, que es mi casa y espero hacerlo bien. Le tengo un gran cariño al club".

El Guadalcacín aventaja en ocho puntos al tercer clasificado y "desde fuera se puede pensar que vamos directos a Tercera División pero esto es muy largo, queda mucho y puede llegar una mala racha. Llevar nueve victorias consecutivas es impresionante pero ahora vamos a Puerto Real, a un campo pequeño y en el que suelen ser muy fuertes. No nos podemos fiar. En el vestuario hay jugadores que saben conducir a los más jóvenes, y eso es muy bueno".

La de Martel, probablemente, no será la últimoa incorporación de un Guada que no prevé salidas pese a que hay jugadores con ofertas.