La cuenta atrás empieza este mediodía en el Campo de La Juventud, donde la segunda vuelta arranca con un derbi que se presume vibrante por lo que se juegan unos y otros; en efecto, cuando el calendario queda en su ecuador y comienzan a descontarse jornadas para el final, el margen de error se va reduciendo y la cuenta atrás se aproxima a su final, aunque sean para objetivos tan distintos como los que persiguen Xerez B y Atlético Sanluqueño: los de casa aspiran a lograr la permanencia y los visitantes a meterse en la fase de ascenso. Vidas distintas en la misma competición, esa que hoy a las doce les enfrenta en Jerez.

Ni que decir tiene que el duelo adquiere tintes poco menos que dramáticos para el filial, que lleva una vida paralela a la de su hermano mayor; con ocho derrotas consecutivas, estar a sólo tres puntos de la salvación parece un milagro y la clasificación permite seguir soñando con la permanencia, aunque para huir de la quema Antonio Puche y los suyos saben que deben cambiar de rumbo ya, empezando por asegurar los partidos de casa.

Enfrente, el Xerez B se las verá con un Sanluqueño consciente de que debe mejorar sus prestaciones lejos de El Palmar para aspirar con más garantías a acabar la fase regular entre los cuatro mejores. Así las cosas, en el choque de hoy parece claro que unos y otros se juegan algo más que tres puntos pese a ser tan sólo el inicio de la segunda vuelta, la definitiva, de la competición.

Sin duda, el Atleti es un mal invitado para el intento de reacción del Xerez B, y Antonio Puche, entrenador del filial que suma tres de las ocho derrotas consecutivas, quiere que su equipo imprima un ritmo alto de juego para que el Sanluqueño no pueda pensar ni poner en juego su calidad. Puche y su plantilla asumen que el margen de mejora es amplio, comenzando por el nhúmero de goles encajados y acabando por la cifra de tantos a favor: "Está claro que tenemos que mejorar pero estoy contento con el trabajo de la gente", dice el preparador del filial, que asegura que no piensa en fichajes porque "tenemos muchas limitaciones" aunque Pedro Pérez, consejero de la cantera, anunció ayer que el filial se reforzará.

En cuanto al equipo, Puche no tiene bajas y ha citado a todos sus efectivos para hacer la convocatoria en La Juventud, donde los descartados tendrán sesión de entrenamiento. El técnico del filial recupera a Añón, que vuelve tras cumplir sanción, y sólo tiene las dudas en cuanto al estado físico de Serguinho y de Ántoni, ambos con molestias. En el equipo habrá cambios con respecto al que cayó en Puerto Real, tanto por jugar en casa como por buscar un 'once' con más velocidad y que imprima un ritmo alto.

En el Sanluqueño, Moreno Rosillo no tiene bajas y desplaza a toda su artillería tras recuperar a Rubio, que dejó atrás la gripe. La convocatoria la forman diecisiete jugadores y además del posible once, se desplazan Moi, Moisés, Rubio, Salamanca y Dani Almendro. El entrenador verdiblanco baraja la opción de introducir una variante en el centro del campo que bien podría ser la entrada de José Mari en detrimento de Silveria, con problemas físicos en las últimas jornadas, aunque Moreno Rosillo no dio pistas.

Los que sí dejó claro el preparador del Sanluqueño es que espera volver a jugar como en casa, como hizo la pasada jornada contra el Industrial en La Juventud, donde se desplazaron cerca de quinientos aficionados sanluqueños: "Jugamos como en casa, por eso el punto nos supo a derrota. Siempre que nuestra afición se desplaza en masa -como a Sevilla o San Fernando- el equipo ha perdido y ya es hora de darle una alegría".

alineaciones probables