Juegos Paralímpicos | Baloncesto en silla de ruedas

Los hermanos Alejandro y Pablo Zarzuela acarician una nueva gesta

  • España se impone a Alemania y se medirá a Estados Unidos, su verdugo en la final de Río 2016, en semifinales

Alejandro Zarzuela atiende las instrucciones de los técnicos en un momento del partido ante Alemania.

Alejandro Zarzuela atiende las instrucciones de los técnicos en un momento del partido ante Alemania. / EFE/Paulino Oribe

Pablo y Alejandro Zarzuela continúan añadiendo éxitos a su importante palmarés y lucharán por las medallas en los Juegos Paralímpicos de Tokio. La selección española de baloncesto ha vencido a Alemania en cuartos (71-68), sigue invicta y ha accedido por la vía rápida a semifinales, donde se medirá por un puesto en la final con Estados Unidos.

Los hermanos jerezanos vuelven a encontrarse con el rival que les dejó sin el oro en Río 2016, cuando perdieron la final frente a los estadounidenses. Ahora, aunque la misión es complicada, tienen la oportunidad de devolverles la pelota y luchar por el metal que se les escapó en Brasil.

Alejandro, que salió en el cinco inicial, anotó 11 puntos, mientras que su hermano Pablo logró dos, pero también puso su granito de arena en el triunfo final.

España, después de completar una fase de grupos perfecta, con cuatro victorias en cuatro partidos, se encontró en cuartos con un combinado germano que salió como un torbellino a la cancha con un 0-7 de parcial.

Un tiempo muerto para aclarar ideas le valió al equipo español para remontar y empezar a tomar la delantera en el marcador pasado el minuto cinco de partido liderado por Asier García y Jordi Ruiz, que se mostraron como los jugadores más determinantes.

Con seis puntos arriba regresó España del descanso, una renta que pudo mantener porque las rotaciones efectuadas y las aportaciones en ataque de hombres de refresco como Amadou Diallo o 'Pincho' Ortega se lo permitieron.

En el último cuarto, los alemanes pidieron revisión de la silla de Asier García al creer que la altura del asiento era superior a lo permitido. Los colegiados la midieron, comprobaron que estaba todo correcto y esa decisión tocó el orgullo de los españoles, que a partir de ahí sacaron su mejor versión ofensiva para tomar distancia en el marcador.

Dos triples de Thomas Boehme y Andre Bienek en el momento clave sostuvieron a Alemania hasta el final, aunque la fortaleza defensiva mostrada por los hombres de Óscar Trigo les permitió no sufrir en exceso.

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