"No podemos cometer los errores de otras conmemoraciones de la propia ciudad o de la provincia". El diputado provincial Fran González advertía ayer de esta manera sobre la celebración del Tricentenario del traslado de la Casa de Contratación del Comercio de Indias desde Sevilla a Cádiz, que se cumplirá en 2017. González adelantó ayer que la Diputación, siempre que el pleno que celebra hoy miércoles apruebe la moción del equipo de gobierno (PSOE-PA), quiere aglutinar a entidades públicas y privadas, así como a la Universidad, para conmemorar como es debido un hito histórico que puso a Cádiz en el centro del comercio internacional y trajo a la ciudad una prosperidad desde entonces no repetida. El pleno de la Diputación deberá aprobar hoy la conmemoración, la preparación de un programa de actos y la creación de una Comisión Interdepartamental que lo elabore. 

González indicó que los objetivos de esta propuesta son "elevar la autoestima, crear una conciencia de identidad con nuestro pasado de esplendor y promover una reflexión y un debate" acerca de las posibilidades de desarrollo futuro de la ciudad de Cádiz y todo el entorno de la Bahía. 

El diputado socialista mostró su deseo de que la conmemoración sirva de "revulsivo para el la ciudad y la Bahía", que se produzca un entendimiento de entre todas las instituciones, para "huir de las confrontaciones" y alcanzar un consenso que pueda convertirse en un momento de "reivindicación y de encuentro". 

Asimismo indicó que ya existe una comisión de la Diputación para poner en valor los recursos de la Institución al servicio de esta efemérides y que ya está diseñando un borrador de actividades, y adelantó que, aunque no está todavía cerrado el calendario de actividades, tendrá protagonismo la divulgación de lo que significó este hecho histórico el trabajo con población escolar y la celebración de una exposición conmemorativa con dos ejes principales: el comercio y la navegación. 

Como curiosidad, el único edificio que sigue en pie y que jugó un papel importantísimo en aquellos años de esplendor, es el propio Palacio Provincial de la Diputación, que por entonces fue sede del Palacio de Aduanas.