Economía

Unicaja Banco aprueba las cuentas de 2020 y reparte 16,9 millones de dividendos

Manuel Azuaga (centro) durante la Junta General Ordinaria de Accionistas de Unicaja Banco.

Manuel Azuaga (centro) durante la Junta General Ordinaria de Accionistas de Unicaja Banco. / M. H. (Málaga)

Unicaja Banco, cuya junta de accionistas ha dado este miércoles luz verde a la fusión con Liberbank, ha aprobado las cuentas de 2020 con un beneficio neto de 78 millones de euros, repartirá 16,9 millones de dividendos de ese ejercicio y ha acordado reducir su capital social en 1.991 millones para crear una reserva voluntaria.

La aplicación del resultado aprobado se divide en un primer tramo de 11,54 millones de euros a abonar a los accionistas de Unicaja Banco con carácter previo a la inscripción de la fusión durante abril de este año y un segundo de 5,36 millones a pagar tras la inscripción de la fusión en el Registro Mercantil.

El presidente de Unicaja Banco, Manuel Azuaga, ha explicado, durante la junta general ordinaria de accionistas que ha aprobado ese reparto, que se ajusta a las recomendaciones del Banco Central Europeo (BCE), entre ellas que se mantenga por debajo del 15% del beneficio acumulado de los ejercicios 2019 y 2020.

La junta ha acordado reducir el capital social en un importe de hasta 1.991,2 millones de euros para la creación de una reserva voluntaria indisponible, mediante la disminución del valor nominal de la totalidad de las acciones en 0,75 euros hasta los 0,25 euros por acción con base en el balance cerrado a 31 de diciembre de 2020.

También se delega en el consejo de administración la facultad de emitir valores convertibles en acciones de la sociedad por un máximo de 500 millones de euros o su equivalente en otra divisa con atribución de facultades para aumentar el capital en la cuantía necesaria, así como de excluir el derecho de suscripción preferente de los accionistas. El sindicato CSICA anunció su voto contrario a la remuneración de los consejeros al considerar que no se cumplen criterios de equidad.

Azuaga ha destacado que con la aprobación de la fusión se abre una nueva etapa y ha agradecido el respaldo a la operación. Ha resaltado que las entidades bancarias actúan durante la pandemia como factor mitigador de la crisis y que Unicaja ha fortalecido la buena posición de partida para afrontar la incertidumbre de la evolución de la situación sanitaria con una capacidad de revertir en la segunda parte del año la dinámica comercial y los efectos negativos de la paralización de actividad.

El beneficio neto de 78 millones de euros del grupo Unicaja resulta tras las dotaciones extraordinarias de 200 millones por la Covid. El presidente ha enfatizado que se han reforzado los niveles de cobertura y solvencia y se ha referido a la caída sostenible de los activos no productivos y la tasa de morosidad hasta situarse en el 4,2%.

Ha añadido que se afrontan los retos externos e internos y que Unicaja -cuyo accionista mayoritario es la Fundación Bancaria Unicaja- se sitúa en los primeros ratios de solvencia y liquidez y que, gracias a ello, se vislumbra un futuro sólido.

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