Sevilla y Cádiz sufrirán el grueso del ajuste de 360 empleos de Airbus en España
El recorte se debe a la caída de producción de dos modelos: el avión militar C295 y el civil A380. La compañía no renovará a 180 temporales y tratará de recolocar al resto en programas al alza.
El estancamiento en los pedidos de dos modelos emblemáticos de Airbus -el avión militar C295 y el civil A380 (el más grande del mundo)- provocará un ajuste de la plantilla en España el año que viene. La compañía aeronáutica ha anunciado a sus trabajadores que rebajará la cadencia de producción de ambos programas y, por tanto, necesitará menos mano de obra. Concretamente, 360 personas menos. A entre 150 y 180 no les renovará el contrato temporal, mientras que al resto (de 180 a 210 empleados) los intentará recolocar en otros proyectos de mayor éxito, como los aviones comerciales A350 o A320Neo, el tanquero A330MRTT, e incluso en el departamento de servicios (en áreas como el entrenamiento de tripulaciones o el servicio al cliente).
En Andalucía, la medida impactará de lleno. De hecho, tres de las cinco plantas españolas que sufrirán los ajustes se encuentran en Sevilla (San Pablo y Tablada) y Cádiz (Puerto Real). Las otras dos son las de Getafe (Madrid) e Illescas (Toledo). Airbus no facilita el reparto del ajuste por centros. Fuera del recorte queda el CBC (Centro Bahía de Cádiz) en El Puerto de Santa María.
El C295 es un avión de transporte militar vinculado a Sevilla. En la factoría de Tablada se lleva a cabo la integración de su fuselaje, mientras que el montaje final del aparato, el primer vuelo y la entrega a cliente se realizan en San Pablo. Acumula 169 pedidos, de los que ya ha entregado 155, por lo que sólo quedan pendientes 14 aparatos. Se trata de un modelo que está sometido a muchos altibajos, con lo que a rachas de fuerte demanda siguen otras de bajón. De ahí que Airbus haya decidido ralentizar su producción, pasando de las 16 unidades de este año a las 10 que se fabricarán en 2017. Una decisión que tendrá también serios efectos en la industria auxiliar, pues este modelo aporta, junto al avión militar CN235, el 23% de la facturación del sector en Andalucía, donde muchas pequeñas y medianas empresas desempeñan trabajos para el programa. No obstante, la compañía envía un mensaje tranquilizador de cara al futuro al hacer hincapié en que tiene campañas de venta activas en todo el mundo -las de Canadá e India, las más avanzadas- y está trabajando en nuevas versiones de la aeronave para abrir más nichos de mercado.
El superjumbo A380, el avión de pasajeros más grande del mundo, también atraviesa un momento delicado. Se trata de un modelo gigante que no todas las aerolíneas pueden permitirse, por lo que está encontrando dificultades para seducir a nuevos compradores. Sus encargos ascienden a 319 unidades, de los que 198 ya se han resuelto, con lo que son 121 aparatos los que están pendientes de entrega. Ante este panorama, Airbus ha tomado una medida drástica: rebajar la cadencia de producción anual a la mitad. Así, pasará de los 25 aviones que fabricará este año a los 12 que se ha marcado como tope para 2017.
Del A380 en Andalucía también se hace una parte muy relevante. En la planta de Airbus en Puerto Real se lleva a cabo el ensamblaje de su estabilizador horizontal de cola (HTP). Este centro tiene, además, la responsabilidad de la panza (belly fairing) del avión, pieza clave subcontratada a la compañía andaluza Alestis.
Airbus no aclaró ayer si las recolocaciones de los trabajadores que salgan de estos dos programas (los entre 180 y 210 empleados mencionados) tendrán carácter voluntario y si los traslados se harán hacia otras plantas del grupo en España o fuera del país. Sin embargo, todo apunta a que podrían tener un hueco en las factorías españolas que albergan aquellos proyectos alternativos con mayor recorrido.
Así, Puerto Real, que fabrica los timones de cola del A320Neo, podría acoger parte de ese excedente. Este modelo de avión civil goza de una salud extraordinaria, puesto que cuenta con 3.385 pedidos en cartera, de los que sólo se han realizado 32 entregas, con lo que tendrá una larga trayectoria. Asimismo, el A350, avión de pasajeros que también está teniendo buena acogida, podría ser el destino de otros empleados. Con 810 encargos, ya hay en manos de los clientes 45 aparatos, con lo que los 765 restantes auguran un camino ascendente a su producción. De este modelo también hay carga de trabajo en la factoría de Puerto Real, que se encarga de los cajones laterales del estabilizador horizontal, que son enviados a Getafe para ser ensamblados en el HTP.
Precisamente, en Getafe es donde pueden acabar también muchos de los recolocados. En esta planta de Airbus es donde se hace la reconversión de los aviones A330 en tanqueros o aeronaves cisterna (MRTT). Este modelo puede dar muchas alegrías a Airbus, pues está ganando bastantes concursos a nivel internacional. De momento, cuenta con 57 encargos, de los que 34 ya se han entregado.
Airbus genera unos 10.000 empleos directos en España. Los dos centros de Sevilla suman en torno a 2.000 trabajadores, mientras que el de Puerto Real está en torno a los 500. El de Getafe es el más multitudinario, con2.000 profesionales, mientras que el de Illescas roza los 700.
La OMC declara ilegales ayudas de EEUU a Boeing por 5.700 millones
La Organización Mundial del Comercio (OMC) pidió ayer a EEUU que retire unas subvenciones prohibidas otorgadas por el estado de Washington a Boeing para que fabrique allí el modelo 777X, una primera "victoria importante" para la UE y Airbus que es aún apelable. En un esperado fallo sobre la larga disputa que enfrenta a la UE y EEUU desde hace 12 años por las ayudas públicas a sus firmas aeronáuticas Boeing y Airbus, el Grupo Especial de la OMC pide al gobierno estadounidense que retire "sin demora" las subvenciones prohibidas en un plazo de 90 días. Según la UE, su valor asciende a 5.700 millones de dólares, de un paquete total de incentivos fiscales que el estado de Washington había cifrado en 8.700 millones. Bruselas recurrió en 2014 a la OMC por la decisión en 2013 de Washington de modificar y ampliar hasta 2040 unas ventajas fiscales a Boeing a cambio de que el grupo produjera allí el ala y el fuselaje del 777X, y el montaje final. En su decisión, el panel indica que estos incentivos suponen una subvención supeditada "de facto" al empleo de productos nacionales con preferencia sobre los importados, lo que supone discriminar a fabricantes extranjeros. La Comisión Europea calificó ayer de "victoria importante para la UE y su industria aérea" la decisión, y la comisaria de Comercio, Cecilia Malmström, esperó que EEUU "respete las normas, se atenga a una competencia justa y retire estos subsidios sin retraso". Hay un plazo de 60 días para recurrir las conclusiones del Grupo Especial, lo que deja en manos del próximo presidente de EEUU, Donald Trump, la determinación de cómo proceder por parte de Washington.
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