El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó ayer al fabricante de automóviles General Motors (GM) con la imposición de aranceles aduaneros a menos que produzca sus vehículos en Estados Unidos.

Trump dijo en un tuit que "General Motors está enviando el modelo Chevy Cruze hecho en México a los concesionarios de EEUU sin tarifas. ¡Fabrique en EEUU o pague un gran arancel aduanero!", sentenció.

Tras el tuit de Trump, General Motors (GM) dijo en un breve comunicado que produce la versión sedán del Cruze en Ohio. "Todos los Chevrolet Cruze sedán en venta en Estados Unidos son producidos en la planta de montaje de GM en Lordstrom, Ohio. GM fabrica el Chevrolet Cruze de cinco puertas para mercados globales en México y un pequeño número es vendido en Estados Unidos", explicó el fabricante.

Hasta ahora se consideraba que Donald Trump tenía una buena relación con General Motors, cuya presidenta, Mary Marra, le ha asesorado en cuestiones económicas. Además, el futuro mandatario tiene debilidad por Cadillac, una marca de la compañía automotriz.

En el pasado, Trump ha realizado similares amenazas contra Ford. Durante la campaña electoral, la acusó de despedir a miles de trabajadores en EEUU para desplazar parte de su producción a México. Y, posteriormente, se atribuyó la decisión de la compañía de producir una serie de camiones semipesados en EEUU en vez de en México. La empresa emitió un comunicado negando que Trump influyese en sus decisiones y que esa decisión la había tomado en 2011.