Economía

La prima de riesgo se relaja hasta los 385 puntos tras superar por segundo día los 400

  • España afrontará la subasta de deuda de este jueves con ese diferencial tras a llegar a alcanzar las 407 unidades. La bolsa española acumula cuatro días de caídas.

La inestabilidad se volvió a adueñar del mercado de deuda, ya que la prima de riesgo de España registró un leve descenso al cierre de la jornada, hasta situarse en 385 puntos básicos, después de alcanzar por la mañana los 407,4 puntos básicos, su máximo intradía desde la creación del euro.

La prima de riesgo se relajó frente a los 386,7 puntos básicos marcados el martes (el récord al cierre de una sesión desde la entrada en vigor de la moneda única) gracias a que la rentabilidad de los bonos españoles a 10 años se moderó ligeramente, hasta el 6,255 por ciento, frente al 6,282 por ciento del martes. El rendimiento de los títulos alemanes -con los que se compara a los bonos españoles para obtener la prima de riesgo o diferencial entre sus respectivos tipos de interés- bajó en menor medida al pasar del 2,416 por ciento de ayer al 2,403 por ciento al cierre de la jornada de hoy.

La tensión se apoderó de nuevo a primera hora de la mañana de los inversores después de que la agencia de calificación de riesgos Moody's anunciara en la noche del martes que podría rebajar la nota de la deuda de EEUU, que por ahora mantiene en AAA o matrícula de honor. "Los problemas de la deuda en EEUU han generado más inestabilidad en el mercado de deuda, que ya reacciona con pánico al menor movimiento", señalaron los operadores de CM Capital Markets.

El problema es que los ataques contra la deuda soberana de los países que están en el punto de mira de los inversores tienen una mayor repercusión por el escaso volumen negociado en las operaciones. Según las estadísticas del Banco de España, las operaciones sobre deuda pública española que se realizaron el martes al contado fueron tan sólo 95, con un volumen negociado de 744,59 millones de euros, a lo que hay que sumar unos 250 millones del mercado no regulado (OTC). "Esas cuantías han bajado sustancialmente respecto a los 1.500 ó 2.000 millones de euros que se registraban tradicionalmente por el miedo de los inversores, no porque sea agosto", aseguran desde CM Capital Markets.

Italia fue otro de los países que vio relajarse su prima de riesgo, que pasó de 370 puntos básicos a 367,3 puntos básicos, tras marcar un nuevo máximo intradía. El primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, instó al país a no dejarse llevar por el nerviosismo de los mercados, en los que la prima de riesgo de la deuda pública italiana marcó este miércoles un nuevo récord al alcanzar los 390 puntos básicos.

Para intentar frenar el ataque de los mercados, el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, conversó por teléfono con el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, mientras el ministro italiano de Finanzas, Giulio Tremonti, habló con el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, sobre las medidas de contención del contagio.

Según los expertos, la falta de confianza en la capacidad de acción de la Unión Europea ha sido uno de los factores clave que ha propiciado el ataque contra la deuda soberana de los países europeos que no han sido rescatados y que tienen sus finanzas públicas en peor situación.

La bolsa española registra un nuevo mínimo anual

La bolsa española bajó el 0,85 por ciento y registró un nuevo mínimo anual cerca de 9.000 puntos, afectada por los malos datos de actividad en los Estados Unidos y por la volatilidad en el mercado de deuda, donde la prima de riesgo se situaba en 385 puntos básicos.

El principal índice de la bolsa española, el Ibex 35, perdió 77,20 puntos, equivalentes al 0,85 por ciento, hasta 9.037,70 puntos, nuevo mínimo anual y un nivel desconocido desde comienzos de julio del año pasado. Las pérdidas acumuladas en este ejercicio ascienden al 8,33 por ciento. En Europa, con el euro a 1,43 dólares, las principales plazas bajaron: Londres, el 2,34 por ciento; Fráncfort, el 2,3 por ciento; París, el 1,94 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 1,85 por ciento, y Milán, el 1,54 por ciento.

Al igual que en la jornada anterior, la bolsa española empezó el día con pérdidas superiores al 1 por ciento que le arrastraban hasta el nivel de 9.000 puntos. La caída del 2,2 por ciento el día anterior en Wall Street, que perdía la cota de 12.000 puntos, la bajada del 2,1 por ciento de Tokio esta madrugada y la situación del mercado de deuda, donde la prima de riesgo se elevaba hasta 407 puntos básicos, nuevo máximo, determinaban la bajada de la bolsa española.

A pesar del mantenimiento de la puntuación AAA de la deuda de Estados Unidos por las agencias de calificación de riesgos Moody's y Fitch, el rendimiento de las obligaciones a diez años españolas avanzaba hasta el 6,35 por ciento. Sin embargo, a pesar de los resultados y las malas previsiones de Societe Generale, y de la caída de la actividad en el sector servicios español (crecía en la zona euro y en otros países europeos), la bolsa rebotaba y conseguía ganancias una hora después de la apertura mientras se intensificaba la actividad política con la intención de encauzar la situación de los mercados financieros.

La subasta de letras a tres meses en Portugal, que colocó 750 millones de euros, el máximo previsto, y la relajación de las ventas en el mercado de deuda servían para rebajar la prima de riesgo, que descendía hasta 375 puntos básicos al mediodía. La bolsa subía más del 1 por ciento y avanzaba hasta 9.250 puntos y el euro escalaba a 1,43 dólares, aunque el día comenzaba con la moneda única en 1,415 dólares.

Los datos de solicitudes de hipotecas semanales en los Estados Unidos, que crecieron el 7,1 por ciento, y la creación de 114.000 empleos el mes pasado en este país, según datos de la consultora ADP, servían para mantener las ganancias de la bolsa nacional, que continuaba sobre 9.200 puntos. Sin embargo, las pequeñas pérdidas de Wall Street tras la apertura crecieron con la caída del 0,8 por ciento de los pedidos de fábrica estadounidenses de junio y el descenso de la actividad en el sector servicios de la mayor economía del mundo en julio, de 53,3 a 52,7 puntos.

Por este motivo, la bolsa española pasó de cerca de 9.200 a 9.000 puntos una hora antes del cierre. En esta caída influía el descenso del precio del petróleo por el aumento de las existencias estadounidenses (el Brent bajaba de 116 a menos de 114 dólares por barril). El incremento de las pérdidas de Wall Street determinó que la bolsa española perdiera el nivel de 9.000 puntos, aunque pudo cerrar sobre ese precio.

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