El presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, afirmó que el lehendakari, Patxi López, no tenía otra opción que adelantar las elecciones "porque se había metido en un callejón sin salida" al "renunciar a la makila de lehendakari para coger el banderín electoral del PSE-EE". Asimismo, advirtió de que en estas elecciones la ciudadanía "se juega" no caer en el "precipicio" de la independencia que, a su juicio, plantean Bildu y PNV.

Basagoiti señaló que el adelanto electoral es "lo normal" porque Patxi López se había metido "en un callejón sin salida" al cambiar las "prioridades" que le llevaron a ser lehendakari y utilizar el Gobierno vasco para hacer "campaña contra las reformas nacionales". Señaló que "es muy de socialistas dejar la caja vacía y el cajón lleno de facturas", pero espera "más responsabilidad" del Gobierno vasco.

Tras la decisión de Patxi López de adelantar las elecciones vascas, Basagoiti aseguró que "López llevaba un tiempo utilizando la lehendakaritza, no para lo que le llevó allí, sino para hacer campaña electoral".

En este sentido, consideró que el PSE-EE ha pretendido "olvidar que el PP le aupó a Ajuria Enea" y le respaldó hasta que se dedicó a "hacer campaña de extrema izquierda y a tener ojos para la izquierda abertzale e implorarle un favor de tipo futuro".

"Por lo tanto, lo más justo, lo más democrático y lo más oportuno era que convocase elecciones. porque él ya sabe lo que piensa la mayoría de la sociedad. Por mucho que lo intente ocultar, es lehendakari por el apoyo del PP y por mucho que lo intente ocultar, hoy no está haciendo aquello que le llevó a ser lehendakari", aseveró.

No obstante, destacó que él está dispuesto "a hablar de todo" porque el PP vasco es "un partido dialogante". "Y yo, hasta que se celebren las elecciones, voy a seguir arrimando el hombro en aquellas cosas que me parezcan razonables. Lo que no quería hacer era sustentar a un gobierno en todas sus leyes, cuando estaba en el poder para una cosa muy distinta a la que le llevó a la institución", advirtió.

El presidente del PP vasco se mostró convencido de que el nuevo Gobierno vasco, "el que sea", va a tener que realizar ajustes. "Aquí se tendrán que hacer, lo digan o no lo digan y, si no, los impondrá Madrid, para salir de la crisis", añadió.

En este sentido, criticó la actitud del lehendakari y del presidente del EBB del PNV, que están "en lo que estaba Zapatero" en decir "aquí no pasa nada" y defender que Euskadi "está en la Champions League".

El representante popular trasladará al lehendakari y al presidente del EBB del PNV, Íñigo Urkullu, su propuesta para alcanzar "un acuerdo político" con el fin de "blindar los pilares democráticos" de la sociedad vasca y garantizar la convivencia con una paz "definitiva", y manifestó que, si lo rechazan, "a lo mejor, es que tienen intereses con Batasuna".

"Yo no estoy pensando en pactos poselectorales, en acuerdos para gobernar, no digo que tenemos que aprobar esta ley o la de más allá, sino que les ofrezco un acuerdo por la convivencia, para que podamos convivir en Euskadi, fortaleciendo lo que nos ha unido a los demócratas, que es el rechazo a ETA, pero desde parámetros de defender los proyectos democráticos que tenga cada uno", indicó.

Según explicó, se trata de "tender la mano para que no haya una imposición" y poner "unos cimientos sólidos para que cada uno defienda su proyecto político dentro del ámbito de la democracia". "Lo que no puede ser es que después de haber conseguido que ETA tenga que anunciar que deja de asesinar, encima ellos tengan la bandera de la paz, el beneficio de la democracia y el clamor de la ciudadanía", subrayó.

Tras precisar que él no planteó este ofrecimiento como un "pacto anti Bildu", insistió en que la sensación que él percibe "es que, por intereses electorales, tácticos o por miedos políticos, se está engordando la posición política de Batasuna".