Un año más la imponente caseta de González Byass, antiguo templete municipal, acogerá la entrega de uno de nuestros más señeros y antiguos títulos: Es el 'Sombrero de Oro', premio instituido por la asociación del Sombrero de Ala Ancha, que este año recaerá en la persona de Ignacio Sánchez de Ibargüen Benjumea, conde de Los Ángeles. Las acreditaciones son más que suficientes: Una excelente trayectoria en el mundo del caballo, especialmente en el arte de acoso y derribo, del que ha sido campeón de España en varias ocasiones, y en la divulgación del sombrero, "defendiendo y divulgando nuestras costumbres, así como el uso del sombrero de ala ancha jerezano", tal como consta en la presentación del acto.

El sombrero de ala ancha no es igual al sombrero cordobés. Es más grande en diámetro. La calidad más económica es el sombrero de lana pero la calidad intermedia, la serie plata, está fabricada en pelo de conejo con un gramaje de 250. El sombrero de ala ancha de cinco estrellas pesa 280 gramos y también está fabricado en pelo de conejo con un gramaje de 250. La serie plata y la serie 5 estrellas son iguales excepto en el peso, ya que el cinco estrellas pesa 30 gramos más. Las tres calidades de sombrero tienen las mismas medidas y formas. Para saber su talla sólo hay que medir el contorno de la cabeza en centímetros y ahí le dará la talla.

Como casi todo en Jerez, todo comenzó alrededor de una copa de jerez. Gracias, sobre todo, a la obstinación de Fernando Romero Benítez, un hombre que se planteó mantener las costumbres jerezanas. Así surgió la denominada Asociación del Sombrero de Ala Ancha, que ya cumple los siete años desde su fundación.

Desde el pasado 2009, Fernando Romero mantuvo diferentes conversaciones que, finalmente, cristalizaron en la concesión anual del premio 'Sombrero de Oro'. Cada año, los miembros de la asociación se calan sus amplios sombreros y disfrutan de grata convivencia. Esto del sombrero de ala ancha no es ninguna broma: José María González, propietario de 'Sombrerería González', en pleno corazón de Jerez, puede presumir de clientes y de facturaciones. El sombrero de ala ancha no es exclusivo de Jerez; "Son muchos los que enviamos a Tokyo, Nicaragua o Australia", dice José María González.