Festival de Jerez

"El flamenco no es un deporte, nuestros 'saltos' deben tener arte"

-¿Qué le pones y qué le quitas al Festival de Jerez?

-He visto que se agranda cada vez más. Se intentan conquistar más sitios, más proyectos... Con el esfuerzo de las Administraciones se ha consolidado, junto a la Bienal, como el gran festival internacional de flamenco.

-¿Recuerda el sitio más extraño en el que actuó?

-Bueno, encima un camión hace muchísimos años. Y en pleno Metro, allí en pleno Metro.

-¿Quién tiene más compás Rajoy o Zapatero?

-(Risas) Compás, compás, tiene más Zapatero, pero los dos están una 'mijita' desafinados. La política no me incumbe tanto pero sí incumbe a las artes, y les pediría que nos ayudasen a salir de la crisis antes que tanto desprestigiarse e insultarse. Si Rajoy tiene alternativa, o quién esté, que la exponga para que nos enteremos. Estamos esperando que nos digan algo para salir de la crisis.

-¿Qué palo le da más palo?

-(Risas) Qué cabrón... La seguiriya es un palo muy palo, es a pulmón abierto. Escuché a María Soleá con mi padre en el Lope y tembló el teatro en el primer 'ay' que hizo.

-¿Qué le da más miedo los aviones o la crisis?

-(Risas) Me dan más miedo los aviones porque de un avión que se va pa' abajo no se sale tan fácil; de la crisis esperemos que podamos salir. El hombre no está hecho para volar.

-¿Con quién se parte la camisa?

-Con cualquier cosa que me llegue al alma. Soy muy observador y veo ahora lo de Chile en la televisión y cualquier gesto de una madre, aunque sea una imagen secundaria, me conmueve y me parte el alma. En Jerez, cuando me voy de fiesta también me parto la camisa...

-Doctor Canales, ¿qué diagnóstico presenta el flamenco?

-Ha pasado una década extraña. Ya cumplía una edad, se murió aquel Antonio y nace otro que ya es el maestro. Salían muchos chavales jóvenes y ahora hay muchos creadores: Latorre, Grilo... El flamenco es un virus que se propaga demasiado fuerte como para erradicarlo. Ha salido de la UVI, ha ido a planta y a ver si lo podemos volver a paseando por esta avenida Domecq.

-Si hubiera Oscars en el mundo del flamenco o la danza, ¿quién debería haberlo recibido ya?

-A mucha gente. Carmen ha sido una gran olvidada por los momentos de 'no libertad' que vivió. Es la maestra por antonomasia.

-¿Quién da más el cante en el flamenco actual?

-Para bien, Sara Baras. Sara 'no para'. Y me encanta, porque como salió de mi costilla, parte de ese éxito suyo es mío. Queremos lo mejor para ella, y si ahora va a ser mamá, que vuelva pronto. Y hay otras personas que dan el cante pero porque no se marchan nunca. Obviaré el nombre pero ya debe de irse a descansar un ratito a su casa.

-¿Con quién le gustaría marcarse un paso a dos?

-Con Beyoncé tendría un paso a dos largo y tendido.

-¿Usted es más artista de Actimel que de oloroso? ¿Se cuida?

-Micha, micha. No hay que estar ni Danone ni con el hígado destrozado. El flamenco, desde luego, no es un deporte. Nuestros saltos tienen que tener arte y el arte está más cerca del oloroso que del Actimel.

-¿Cómo se realiza en su ambiente doméstico? ¿A qué dedica el tiempo libre?

-Vivo al lado de una ganadería a las afueras de Madrid. Monto a caballo, tengo gallinas, pollos, me gusta poner mi leña... Me levanto a las seis de la mañana todos los días de mi vida. Después de estos años sabáticos que me he pasado, porque casi me mata el amor, he cambiado al completo mi tipo de vida.

-¿De qué va Canales por la vida?

-De bailaor, de bailarín. No me queda otra. Cuando he querido dejar de bailar, no he podido. Pido a las instituciones que se aprovechen de mí. Que me ayuden y me den cosas para que enseñe a los niños y pueda vivir tranquilo los años que me quedan.

-De no haber sido artista en esta vida, ¿qué habría elegido?

-Hubiese sido artista. No es que a mí me guste el arte, es que yo le gusto a él.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios