-¿Qué tiene el Festival de Jerez que no tienen los demás?

-Solera. Organización y proyección internacional.

-¿Cuál es el sitio más raro en el que ha actuado?

-En Corea del Sur, en Seul. Fue en un festival rarísimo, era un festival de músicas mediterráneas, pero muy raro, la verdad que sí.

-¿Con quién se daría una pataíta con Rodríguez Zapatero o con Rajoy?

-Con Zapatero. Pero vamos... Una pataíta le daba yo a él.

-Si fuese político, ¿qué sería lo primero que cambiaría?

-El presupuesto para la cultura, eso de momento. Haría un presupuesto para la cultura flamenca y haría que ésta se incorporará en las escuelas.

-¿Qué palo le da más 'palo'?

-La rumba. Es un palo que no se define como tal y, sin embargo, sí lo es. Como tenga una borrachera encima no lo bailas, y es un poco a ver qué hago aquí. Si me la ponen en el escenario, a mí me da palo.

-Con la crisis, ¿el flamenco da para forrarse o para llenar la nevera?

-El flamenco (risas) siempre ha estado en crisis, ahora simplemente hay una excusa.

-¿Hay algo que le dé 'jindama' del flamenco actual?

-No.

-¿A quién o qué se llevaría a una isla desierta?

-A mi familia. A mi hija y a mi novio.

-¿Qué artista le 'pone' o le 'ponía?

-Siempre he admirado muchísimo a Antonio Gades y a Pina Bausch, aunque ella no es flamenca.

-¿Quién da más el cante en el flamenco actual?

-¿Quién da más el cante? Enrique Morente.

-¿A quién o a qué le haría un desplante?

-No que le haría, sino que le hago un desplante a la ortodoxia flamenca.

-¿De qué va Ángeles Gabaldón por la vida?

-De mujer, que ya es bastante (risas).

-De no haber sido artista, ¿qué otra profesión hubiese elegido?

-Es que habría sido artista siempre. Si no hubiese sido bailaora, mi pena es no haber sido músico, de hecho estoy estudiando música para llegar a serlo. Hubiera cantado, si pudiera cantar, no cantaría. Si tuviera don de voz, no bailaría. Si pudiera cantar lo que fuera, pues cantaría de todo.