La singularidad hecha baile

Reconozco que la primera vez que vi bailar a Jesús Fernández, en el XV Festival de Jerez, descubrí a un bailaor poco común, un bailaor con gran dominio de la expresión corporal y unas condiciones innatas para la danza. Casi ocho años después de aquel 'Ataduras', el gaditano ha encontrado el lenguaje ideal para exponer lo que siente, un lenguaje basado en el gesto, en la plasticidad y donde la técnica y la precisión adquieren un alto grado de protagonismo.

En ese devenir dancístico, Jesús ha encontrado un guía, Daniel Doña, alguien que le ha hecho deambular por otros caminos, caminos concretos, caminos peculiares, caminos más contemporáneos pero caminos bien definidos. Su mano se aprecia a lo largo de todo el montaje, pero especialmente con la inclusión de elementos más cercanos a la danza, que se observan con especial claridad al final de la obra. Sobre ese mapa, el bailaor desarrolla 'Puntos inacabados', estrenado ayer oficialmente en la Sala Paúl.

Al contrario que en anteriores propuestas, Fernández ha optado por rodearse de una serie de actores secundarios que por momentos pasan a primer plano, pero siempre sabiendo de antemano quién manda. Así, Iván Amaya pone el toque más actual, más cercano a la danza, Anabel Moreno, es el contrapunto femenino al bailaor, una especie de musa con la que confecciona paso a dos y coreografías especialmente llamativos y trabajados. El tercer hombre, por llamarlo de alguna forma, es el binomio que forman Miguel Ortega y José Almarcha, cante y guitarra.

Hablar de Miguel Ortega es hablar de la perfección. Sus apariciones aportan seguridad, pero sobre todo conocimiento y una vocalización exquisita. Tarantos, cartageneras, garrotín, pregones, cantiñas, romeras, mirabrás, serranas, bulerías de Utrera y algún que otro verso por soleá forman el panorama cantaor del palaciego, como siempre impecable. Es una garantía. Junto a él, la guitarra de Almarcha, que por momentos asume el rol de fiel seguidor del cante, y en otros emerge como gran solista, gracias a una pulsación limpia y contundente.

En medio de todo ese universo, Jesús Fernández se muestra como un bailaor distinto, con un estilo bien definido y muy seductor. Su baile se estira y se acorta como un elástico, de ahí que a veces sea muy flamenco, otras mucho menos, unas veces varonil, otras mujeril, a veces es sutil, otras rudo... Es una constante sucesión de contraposiciones dentro de un baile elegante y al que no le hacen falta determinados recursos, como por ejemplo el bracear, para convencer al público. Su nueva propuesta, donde da un salto importante en su carrera, le avala para el futuro. Cuenten con él.

Baile

Puntos inacabados

Baile: Jesús Fernández. Artista invitado: Miguel Ortega (cante). Bailarines invitados: Iván Amaya y Anabel Moreno. Guitarra: José Almarcha. Idea Original: Jesús Fernández. Coreografía: Daniel Doña y Jesús Fernández. Dirección musical: José Almarcha. Espacio sonoro y composición musical: Víctor Guadiana. Diseño de sonido: Víctor Tomé. Diseño de iluminación: Olga García. Taller de vestuario: Gabriel Besa. Edición: Gustavo Zarco. Producción: Jesús Fernández. Día: 5 de marzo de 2018. Lugar: Sala Paúl. Aforo: Lleno.