En mitad de una época de extrema sequía, el pasado mes de marzo ha sido particularmente húmedo en Almería con el paso de la borrasca Nelson en la última semana del mes, coincidiendo con la Semana Santa. A pesar de ello, Almería ha sido la provincia andaluza en la que menos precipitaciones se registraron, aunque en algunos puntos las lluvias dejaron ríos rebosantes y pluviómetros con hasta tres dígitos de agua.

Según los datos recogidos por la Asociación Meteorológica del Sureste (AMETSE) que ya cuenta con pluviómetros en la casi totalidad de los municipios de Almería, la zona de la alpujarra almeriense fue la gran beneficiada, gracias a las persistentes lluvias en Bayárcal donde se registraron de máxima 167,8 l/m2, y Laujar de Andarax con un total de 153,4 l/m2 en la semana del 21 hasta el 28 de marzo, ambos inclusive.

Por tanto, la recta final del invierno y el inicio de la primavera han dado un poco de tregua a la situación de extrema sequía en la provincia de Almería con registros superiores a los habituales en esta época del año, a excepción de la comarca del Levante en la que apenas han tenido incidencia las fuertes lluvias de las últimas semanas del mes de marzo. Mientras en toda la provincia llovía, en dicha zona se registraban las temperaturas máximas que llegaron a alcanzar los 16 ºC.

También fueron protagonistas las fuertes rachas de viento, provocando muy mala mar en la mayoría de las zonas litorales. En el municipio de Carboneras se alcanzaron rachas de hasta 68 km/h.

A pesar de todo, la borrasca Nelson no fue suficiente para la provincia, ya que los hechos posibilitaron que la tierra volviera a recibir la deseada agua caída del cielo, pero los acuíferos almerienses no notaron nada y continúan actualmente bajo mínimos.

Según los registros proporcionados por embalses.net, en la actualidad, la provincia de Almería cuenta con un total de 20 hectómetros cúbicos de agua almacenados en sus embalses. Esta cifra representa un 8,93% de la capacidad máxima de almacenamiento, solo dos hectómetros cúbicos más tras el paso de dicha borrasca.

Además, los datos han empeorado durante el último año, cuando ya se consideró un riesgo de sequía extrema en la provincia. Durante esta misma semana en 2023, se disponían de 28 hectómetros cúbicos almacenados, un 12,50 % del total, y casi un tercio más que hoy en día. La media de la provincia en los últimos diez años se sitúa en los 30hm3, una cifra bastante alejada de la realidad que sacude el panorama actual.

El pantano de Cuevas del Almanzora se encuentra a un 7,45% de su capacidad, albergando una acumulación de 12 hm3, diez puntos por debajo de los litros registrados en la misma semana de 2023. La presa de Benínar se ha sitúa en 8 hectómetros cúbicos actualmente frente a los 6 que tenía en el mismo periodo del año anterior, único dato positivo.