"Sé lo que es trabajar por dos duros y eso ayuda a tener los pies en la tierra"

Aunque su cara se hizo conocida mucho antes de meterse en la piel del galán César Bravo en Tierra de Lobos, ha sido a raíz de esta serie cuando el actor Álex García ha visto aumentar considerablemente su popularidad. Aún así, el canario ha optado por hacer un pequeño paréntesis en televisión para abordar nuevos proyectos profesionales. Y fue en este nuevo camino donde se encontró con Seis puntos sobre Emma, actualmente en cartelera, una película dirigida por Roberto Pérez y en la que comparte protagonismo con la actriz Verónica Echegui . En el filme interpreta a Germán, un sociólogo dispuesto a ayudar a personas con discapacidad que se tropieza con la cruda realidad y acaba descubriendo sus propias cargas emocionales.

"Hacer una mirada interior es el principal objetivo de 'Seis puntos sobre Emma'. No somos conscientes de lo que tenemos alrededor". "Trabajar en esta película no sólo me ha enseñado profesionalmente sino también como persona. Te enseña a mirar hacia dentro y preocuparnos de todas las cosas bonitas que tenemos alrededor. Se toca el tema de la discapacidad pero eso acaba siendo un tema secundario, más bien habla de las minusvalías emocionales. Hay que apostar por lo que uno quiere".

"Llevo muy bien la fama de galán. Nunca tuve la intención de serlo, o parecerlo, pero es una etiqueta que me han puesto por mis trabajos y no me queda más remedio que aceptarlo". "Cuando trabajas en una serie de televisión que triunfa y llega a la gente es muy fácil que terminen encasillándote en un papel. Y eso es lo que me ha pasado a mí con mi papel de César Bravo en Tierra de Lobos. Aunque he hecho otros personajes muy distintos en estos años me he ganado la fama de galán y es una etiqueta absoluta. La única parte mala de ella puede venir en el terreno profesional y eso me toca resolverlo a mí. Tengo que conseguir que la gente no me vea sólo en un papel sino en muchos distintos. No sólo quiero interpretar al protagonista del que todas las mujeres se enamoran, también quiero ponerme en la piel de un loco o un depresivo. Los antihéroes también me emocionan".

"No me considero guapo". "Para nada me veo un hombre atractivo, creo que la gente me ve así por lo que han visto de mí en los medios de comunicación. Una imagen te convierte en llamativo, aunque el personaje sea el más triste de la historia".

"Llevo genial el fenómeno fan. No me agobia que la gente me reconozca, sino todo lo contrario". "Cuando trabajas en televisión se nota bastante que la gente te reconoce más y personalmente no me resulta molesto, es parte de mi trabajo. Las señoras me hablan con mucho cariño y hay niñas que se acercan para contarme sus ilusiones y sus deseos. Escuchar a la gente me gusta y más si vienen con respeto y te felicitan por tu trabajo o te comentan la forma en la que te ven. Su opinión es muy importante, sobre todo para un actor. Lejos de ser desagradable, es bastante gratificante para mí".

"Ganar dinero me ha llevado muchos años de trabajo mal pagado. Siempre he estado en crisis en esta profesión". "Me siento feliz y orgulloso de mí mismo pues he sido paciente y he sabido esperar el tiempo necesario para llegar a ser alguien en el mundo de la interpretación. Ahora es mi momento. He tenido suerte, por supuesto, pero ahora me alegro de no haberme desesperado cuando muchos compañeros de profesión cobraban una pasta y yo estaba trabajando en los café teatro por dos duros. Eso ayuda a tener los pies en la tierra y a valorar lo que tienes. Ahora, muchos de ellos han dejado de ganar tanto dinero por la pésima situación económica y yo, por fin, tengo un trabajo bien remunerado. Tampoco necesito mucho dinero para vivir, mi meta es seguir trabajando en proyectos buenos como Seis puntos sobre Emma".