La comunidad educativa del Colegio Nuestra Señora del Rosario, conocido popularmente como El Beaterio, han denunciado las dificultades que están teniendo para acceder al centro desde que comenzaron las obras que el Ayuntamiento está llevando a cabo en el entorno del Arroyo.

Desde el Ampa se asegura que estas obras han provocado que “para entrar en el colegio solamente haya disponible una calle, y encima está restringida para residentes y sólo tiene un sentido”.

Este hecho hace que “muchos padres, que vienen a lo mejor con o tres niños al centro, no pueden ni tan siquiera detenerse para bajarlos porque además todos los accesos están inhabilitados. Encima, la Policía Local se pone en la zona y no da opción a nada”.

“Antes cuando había alguna situación parecida se podía parar en la Plaza de la Encarnación o también en el reducto de la Catedral, pero ahora no nos dejan ni tan siquiera esta opción, y así es imposible. Date cuenta que el noventa y tantos por ciento del alumnado de este centro viene de la zona sur y por ello, acceden al mismo con vehículos”, confiesa la presidenta del Ampa Eva María Castaño.

El Ampa lamenta que “pese a que pusimos esta situación en conocimiento del Ayuntamiento hace unos meses, no hemos recibido una respuesta todavía, aunque esta semana, según nos han informado, se reunirá con nosotros el delegado de Movilidad”.

No obstante, los padres y madres han pedido la palabra en el próximo pleno para exponer esta situación.

El problema de los accesos no solamente afecta a los estudiantes y sus familias, sino también a la congregación de hermanas que habitan en este centro educativo, uno de los más antiguos de la ciudad. En este sentido, Eva Castaño explica que “ahora mismo hay doce hermanas en el colegio con edades comprendidas entre los 70 y los 90 años, y para ellas también es un problema esta situación. El otro día por ejemplo, una hermana se puso enferma y la ambulancia no podía acceder”.