Programación Guía completa del Gran Premio de Motociclismo en Jerez

Jerez

El Ayuntamiento llama al orden a los hosteleros del Arenal

  • Preservará la imagen de la ciudad frente a la anarquía del mobiliario y la cartelería en los veladores de bares. Admite que el caso de la céntrica plaza se le ha ido de las manos

Una plaga se extiende como la pólvora por las plazas y calles del casco histórico. La 'cartelitis' se propaga por los establecimientos hosteleros y comercios en su dura competencia por enganchar a los turistas con todo tipo de ofertas. Pizarras y rótulos de grandes dimensiones ocupan sin orden ni concierto la vía pública, convirtiéndola en una carrera de obstáculos que los peatones tienen que sortear.

Las asociaciones de comerciantes coinciden en que este caos propagandístico daña la imagen de la ciudad, en particular de la plaza del Arenal, el foco de origen de este mal endémico al que el Ayuntamiento se ha propuesto poner fin con los mecanismos que ofrece la nueva ordenanza reguladora de veladores. La anterior prohibía los carteles, pero muchos hosteleros aprovecharon que se hizo la vista gorda para adueñarse de las calles con anuncios callejeros, a cada cual más grande, de tapas, menús, platos combinados, paellas, arroces, pastas, a los que posteriormente se unieron otros negocios relacionados con la compra-venta de metales preciosos, souvenirs, fotografía... explican fuentes municipales, no sin admitir abiertamente que la situación se ha ido de las manos.

La nueva ordenanza, sin embargo, dispone herramientas para combatir esta anarquía, y sin causar un quebranto irreparable a los establecimientos, tanto a través del apartado sancionador, mucho más flexible, como por la incorporación de la necesidad de detallar los elementos decorativos y/o publicitarios en la solicitud de la licencia de ocupación de la vía pública. No se prohíben expresamente, pero sí obliga a indicar tipo, tamaño y el diseño de los carteles.

El nuevo régimen sancionador contempla la posibilidad de adoptar medidas disuasorias, como la suspensión temporal de la licencia por corto espacio de tiempo para, en caso de reiteración, proceder al antiguo sistema de los expedientes, proceso mucho más lento y que implica sanciones más duras.

Según las fuentes consultadas por este medio, la nueva ordenanza, en líneas generales, es menos restrictiva que la anterior, pero ofrece mucho más margen de maniobra para disuadir a los que incumplen las normas básicas de higiene y ruido, pero también en cosas clamorosas como la estética de los veladores y su distribución, en las que se puede preservar un orden con la adopción de medidas cautelares y no traumáticas.

La nueva norma. consensuada con las asociaciones de comerciantes y consumidores y aprobada por el pleno el pasado mes de julio. rescata en cierta medida la filosofía de que el mobiliario urbano -que también abarca las terrazas de los bares- guarde cierta armonía con su entorno, que se integre en lugar de romper la estética y convertir lugares emblemáticos en una verbena o baratillo.

El caso del Arenal es especialmente sangrante para el Ayuntamiento, señalan las mismas fuentes, que aseguran que en esta céntrica plaza hay locales que no respetan absolutamente nada. En la relación de incumplimientos o licencias que se permiten algunos de estos hosteleros aparecen desde los tablaos para actuaciones sin permiso, los equipos de música y los televisores a todo volumen a cualquier hora, al uso de la vía pública como almacén de sillas y mesas apiladas o de envases vacíos.

El Ayuntamiento se lo tomará con calma, ya que antes de abordar el problema quiere seguir trabajando con las asociaciones de comerciantes para homologar el modelo de carteles que más se ajusta al entorno urbanístico del centro. En este sentido, el portavoz del gobierno local, Antonio Saldaña, asegura que "se tomarán las medidas necesarias", pero "poco a poco", porque los representantes de los comerciantes "son los primeros interesados en que la ciudad dé una buena imagen".

Eso sí, Saldaña deja claro que la intención última del Ayuntamiento es "garantizar la armonía entre el mobiliario y el entorno", pero "sin castigar" al gremio hostelero, a su juicio, la principal novedad de la nueva ordenanza sobre veladores, que comparte el principio jurídico de la presunción de inocencia, pues se parte de la premisa de que "todo el mundo es cumplidor hasta que se demuestre lo contrario".

Y en los casos clamorosos, el portavoz municipal y primer teniente de alcalde es tajante, ya que asegura que al Ayuntamiento no le temblará el pulso para preservar la estética de las calles y plazas del casco histórico, caso de la plaza del Arenal, que "no se va a permitir", sentencia Saldaña.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios