CCOO y UGT, sindicatos mayoritarios en Correos con casi el 80% de representación en Cádiz, denuncian que la empresa está "precarizando el empleo fijo e incluso derivando la actividad, externalizándola para que la realicen falsos autónomos y subcontratados sin vinculación laboral con la empresa postal pública". En concreto, en el Centro de Clasificación de Jerez, Correos hace tiempo que "viene desviando la carga de trabajo hacia el centro que tiene en Sevilla, con lo que ha vaciado premeditadamente de actividad determinadas franjas horarias en las que trabajaba el personal fijo a tiempo completo. Tras esta maniobra, la empresa alegó la necesidad de reconvertir el centro de Jerez cambiando los horarios de la plantilla de los turnos de tarde y noche, introduciendo además decenas de puestos de trabajo a jornada parcial".

Los nuevos horarios impuestos "no solo hacen perder retribuciones a los trabajadores/as afectados, sino que hacen casi imposible la conciliación familiar. La empresa ha despreciado las propuestas alternativas de la parte social, y finalmente los horarios se han implantado para atender la carga de trabajo de paquetería de la filial Correos Express, creando expresamente 31 empleos precarios a tiempo parcial, la mayoría con tan solo 16 horas de trabajo efectivo semanales. Correos degrada de esta forma el empleo fijo de calidad apostando por la creación de empleo basura (algo vergonzoso en una empresa pública), derivando además el reparto de la paquetería hacia trabajadores autónomos y subcontratados que trabajan “a destajo” en la más absoluta precariedad. Mientras esto ocurre, el abandono de la actividad postal tradicional hace que los centros de reparto de Correos estén vacíos, poniendo en grave riesgo el empleo de los más de 28.000 repartidores con que cuenta la empresa matriz en todo el Estado".

La modificación se hace en cumplimiento del Plan Estratégico que ha impuesto el actual presidente, Juan Manuel Serrano, "que busca la reconversión de Correos en un operador paquetero y logístico en el que el servicio público postal se abandona por considerarlo “no rentable”. Un plan que ha sido avalado por menos del 24% de la representación sindical, y que aboca a los 47.000 trabajadores/as de Correos hacia un futuro de pérdida de empleo de calidad, imposición generalizada de flexibilidad laboral, cambios de horarios, movilidad funcional y geográfica, contra el que CCOO y UGT vienen oponiéndose desde hace más de dos años, teniendo convocada Huelga General en todo el Estado para los próximos días 1, 2 y 3 de junio".

Serrano es -añaden- "un gestor incapaz, que fue nombrado a dedo por su afinidad personal con el presidente del Gobierno, cuya pésima gestión en estos dos últimos años ha colocado la cuenta de resultados de la empresa al borde de la quiebra técnica, mientras otros correos públicos europeos como La Poste francesa, o la alemana Deustche Post, declaran beneficios por encima de los 1.000 millones de euros en 2021. Su apuesta personal por reconvertir la empresa, para colgarse medallas de cara a futuras promociones políticas o profesionales vía puerta giratoria, supone un desguace en toda regla de Correos como servicio público a la ciudadanía en todo el Estado, y desde hace tiempo se intentan maquillar las cuentas reduciendo el empleo (son 8.000 puestos menos en los dos últimos años), multiplicando las jornadas parciales en todas las áreas de actividad (en la actualidad más del 25% de la plantilla) y vendiendo el patrimonio inmobiliario de la empresa pública".