Bodegas Fundador ha reinaugurado este viernes, tras meses de restauración, la antigua calle San Ildefonso, 1. Una vía que a partir de ahora servirá para dar paso a los visitantes desde el Centro de Enoturismo de Puerta de Rota hacia el Restaurante La Tapería Fundador situado en calle San Ildefonso, 3.

Durante el acto, el director general de Bodegas Fundador, Rafael Rendón, ha mostrado su satisfacción por este nuevo proyecto de recuperación patrimonial con el que “reforzamos nuestro compromiso por rescatar, mantener y poner en valor el valioso legado histórico de nuestra ciudad”. En este sentido, ha resaltado que la antigua calle forma parte tanto de la historia de Jerez como de las propias bodegas.

Historia

Aunque existen referencias historiográficas anteriores, es en el año 1792 cuando aparece la primera referencia documental clara de la calle: un plano de la plaza de San Ildefonso firmado por el arquitecto Juan Díaz de la Guerra, en el que se representa la entrada a la calle, siendo denominada “calle que va a la Puerta Rota”.

Según ha detallado Rafael Rendón, desde el siglo XIII y hasta el siglo XVIII esta calle fue el acceso principal al corazón de la Medina andalusí y posterior ciudad medieval por la Puerta de Rota”. Además, era una edificación con carácter defensivo perteneciente a la antigua muralla de Jerez. Del mismo modo, en este periodo las calles San Blas y Balderramas eran las vías principales para acceder a San Mateo y a la plaza del Mercado. Sin embargo, “atravesando dicha calle San Ildefonso se tenía acceso directo al resto de la villa, enlazando con las calles Basurto, Benavente Alto y plaza de Belén”.

La primera referencia de la calle aparece en un plano del arquitecto Díaz de la Guerra en 1792

No es hasta el año 1838, tras la expansión de dichas bodegas a través del casco histórico, cuando la calle es adquirida por la compañía e integrada en su patrimonio para unir a distintas alturas las bodegas El Castillo y El Molino, “la más antigua del Marco de Jerez”, según ha recordado Rendón.

Otro hecho histórico relevante ligado a esta vía fue cuando, ya en el año 1904, la compañía decidió unir ambas instalaciones atravesando dicha calle San Ildefonso mediante una escalera de mármol, aún existente, “para hacer más fácil el recorrido del rey Alfonso XIII por nuestras bodegas durante dicho año”.

“Desde 1838 la calle Ildefonso, 1, ha permanecido integrada en nuestras bodegas y, al mismo tiempo, oculta para la ciudad. Hoy, tras muchos meses de intenso trabajo, me gustaría agradecer el esfuerzo y dedicación a todas las personas y empresas que han participado en este proyecto de restauración”, ha destacado Rendón, agradeciendo la labor de todos los que “han hecho posible a Bodegas Fundador reinaugurar la calle San Ildefonso para dar paso a los visitantes desde nuestro Centro de Enoturismo al Restaurante La Tapería Fundador, conectando ambos enclaves directamente a través de dicha antigua calle”.

Trabajos previos

Durante el acto de reinauguración, el arqueólogo Diego Bejarano ha sido el encargado de explicar este viernes el estudio realizado para contextualizar la recuperación de esta calle. Un trabajo que ha quedado expuesto en las bodegas a través de paneles informativos que reflejan todo el recorrido histórico que ha sufrido esta vía.

Bejarano, que ha trabajado junto al historiador José Manuel Moreno Arana, ha detallado que su labor ha consistido “en el análisis de fuentes bibliográficas, es decir, de todos aquellos que habían escrito antes que nosotros: los trabajos de José Manuel Aladro, Fernando Aroca, María Dolores Barroso... Todas las publicaciones que presentaban datos dispersos sobre la calle”. Tras este primer análisis, los datos han sido ordenados y “hemos ido a las fuentes que esas publicaciones referenciaban, tales como el Archivo Municipal, protocolos notariales, actas capitulares, Archivo Diocesano, Archivo General de Andalucía... y con todo ello le hemos ido dando forma con tal de obtener el máximo de datos posibles acerca de la calle que hoy se abre”.

En el siglo XVIII pasa de estar habitada por algunas de las familias de los principales linajes de la ciudad a ser prácticamente abandonada

A modo de resumen, Diego Bejarano ha explicado que la calle San Ildefonso ha vivido unas circunstancias históricas que básicamente se pueden concretar en tres momentos. “Empieza siendo la entrada a la ciudad medieval a través de la Puerta de Rota”, ha recordado. Posteriormente, sufrió un proceso de abandono en el siglo XVIII “y pasó de estar habitada y de tener entre 55 y 64 habitantes y 7 u 8 casas, algunas de ellas de familias de los principales linajes, a ser prácticamente abandonada”. “Es precisamente el motivo por el que la degradación de la zona, en la cual se inscriben los barrios de San Mateo y San Salvador, hace que los vinateros como Juan Haurie, primero, y su sobrino y, después los Domecq, pongan sus ojos en la zona y pase a ser absorbida dentro del complejo bodeguero en un complejo proceso que se prolonga durante todo el siglo XIX”, ha desvelado.

Finalmente, y ya en posesión de la compañía, la calle “cumplirá unas funciones de almizcate, que no es otra cosa que un pasillo entre bodegas para suavizar temperaturas”. Como curiosidad, Bejarano ha rememorado también que a lo largo de la historia esta vía ha recibido varios nombres como calleja de San Ildefonso, callejuela de San Ildefonso e, incluso, callejuela junto a las casas de Don Mateo Sigüenza, “atesorando una historia de 700 años que hoy felizmente vuelve a recuperar”.

Felicitaciones

El acto de reapertura de la calle ha contado este viernes con la presencia de la alcaldesa Mamen Sánchez y de otros miembros de la corporación municipal, así como con la de periodistas, historiadores, arquitectos, directivos de la propia bodega y otras personas involucradas en la realización de la obra de recuperación. Tras la presentación de los trabajos, la alcaldesa ha felicitado al equipo de Bodegas Fundador por la recuperación patrimonial de la histórica calle. Asimismo, ha felicitado al arqueólogo, Diego Bejarano y al historiador del arte, José Manuel Moreno Arana, así como a la empresa de arqueología y gestión del patrimonio, Arqueosistema, “por su participación y contribución a la puesta en valor de una de las arterias que atraviesan parte del centro histórico de Jerez”.

Mamen Sánchez ha aprovechado su intervención para hacer referencia también a la reciente rehabilitación de Torre Riquelme, llevada a cabo por Fundador, destacando por ello “el importante papel de la iniciativa privada y pública en la recuperación patrimonial”.