Centenario de la Escuela de Artes y Oficio, Agricultura y Comercio
Jerez, tiempos pasadosHistorias, curiosidades, recuerdos y anécdotas
En un principio se denominó así, pero más tarde se dividiría en Escuela de Artes y Oficios y Escuela Pericial de Comercio. La iniciativa de su creación se debió al periódico 'El Guadalete'Aspecto de un acto celebrado en el magnifico aula magna de la hoy llamada Escuela de Artes. - FOTO: ARCHIVO.
ESTAMOS en el año en que se conmemora la inauguración de la Escuela de Artes y Oficios, creada en principio como Escuela de Artes y Oficios, Agricultura y Comercio. La iniciativa de su fundación la proclamó abiertamente, en dicho momento, el periódico jerezano "El Guadalete", que llevó a cabo una larga campaña para ello, hasta que consiguió que Jerez pudiera contar con dicho establecimiento docente, el cual fue autorizado oficialmente por real orden de 28 de octubre de 1910, a propuesta del Ministerio de Instrucción Pública, como una continuación a la Academia de Bellas Artes de Santo Domingo, adaptando para ello las dependencias del que fuera monasterio de la Victoria (siglos XVI-XVII), de la orden de los frailes mínimos de San Francisco de Paula, donado a la ciudad gracias al llamado "Legado Pernía" otorgado por el mecenas jerezano Luis Pernía, por lo que al convento también se le conocía como Casa Pernía.
Es en 1911, siendo alcalde de Jerez, el recordado Julio González Hontoria, constructor del parque ferial que lleva su nombre, y debido a la fuerte presión llevada a cabo por "El Guadalete", cuando se crea una comisión municipal presidida por dicha primera autoridad local, encargada de su puesta en marcha, la cual se reúne periódicamente, mientras que se llevan a cabo las naturales obras de rehabilitación del edificio y su adaptación para las distintas aulas, necesarias para el destino a que se dedican los magníficos y amplios locales.
En la creación de las aulas y demás dependencias, intervino como asesor el director de la Escuela de Artes Industriales de Cádiz, Pedro Mayoral, quien visitaría las obras, acompañado del alcalde y del arquitecto municipal, Rafael Esteve, el 14 de enero de 1911 y, a las dos de esa misma tarde, se reunió la comisión organizadora, compuesta por González Hontoria, el edil señor Lassaletta, el marqués de Bonanza, el director del Instituto, Juan Argullós, el edil señor Noriega y el arquitecto municipal, con asistencia igualmente de Mayoral quien explicó a los reunidos sus distintas ideas sobre el proyecto, ofreciéndose incondicionalmente para volver a visitar el edificio, cada vez que se le requiriese para ello y para aclarar cuantas dudas pudieran surgir.
El arquitecto señor Esteve tomó nota de todas las sugerencias de Mayoral, respecto a la distribución de los numerosos locales de que constaba la finca y quedó en el encargo de formalizar un presupuesto de las obras más indispensables. Aunque dicho presupuesto se dejó esperar y las obras se retrasaron más de lo esperado; sugiriéndose entonces que, dado que las clases iban a ser nocturnas, pensando especialmente en las clases obreras, y para que no se perdiera la consignación existente en los presupuestos del ministerio, se intenta adelantar cuanto antes la matrícula, de forma provisional, en el Instituto.
A este respecto, "El Guadalete" de 31 de enero, decía lo siguiente: "Como quiera que las obras que hay que realizar en la finca Pernía, aunque comiencen pronto durarán más de dos meses, por mucho que se activen (…) puesto que se trata de difundir la cultura entre las clases obreras, dado que las clases han de ser nocturnas, bien pudieran habilitarse por el pronto las aulas del Instituto General y Técnico, a la cual creemos no pondrá ningún inconveniente el director de aquél establecimiento. Con estas medidas la Escuela podría entrar a funcionar inmediatamente y el nombramiento de profesores, como es consiguiente, el ministro de Instrucción Pública lo haría en cuanto se le diese cuenta que el nuevo establecimiento de enseñanza podría ya abrir la matrícula.
En la sesión de la comisión municipal permanente del Ayuntamiento, celebrada el 17 de febrero de 1911, se propone oficialmente por varios concejales que las enseñanzas de las artes y oficios artísticos empiecen cuanto antes, habilitándose para ello las aulas del Instituto, ya que el director del mismo, señor Argullós, fue "el iniciador del pensamiento de crear en Jerez un centro de enseñanza técnica, habiendo publicado una memoria sobre tal idea". El periódico "El Guadalete", defensor de la misma desde un principio, esperaba que Juan Argulló la acogería con simpatía, "y seguramente -decía- la Superioridad no habría de oponer dificultades, por tratarse de una obra de cultura, que redunda en beneficio de la honrada clase obrera jerezana".
Desde que el periódico "El Guadalete" lanzara la idea, en 1900, de crear en nuestra ciudad una Escuela de Artes y Oficios Artísticos, hasta la inauguración de ésta habrían de pasar diez largos años, hasta que por fin el domingo, día 3 de diciembre de 1911, a las tres de la tarde, tuvo lugar la inauguración solemne de dicho centro educativo, en la calle Por-Vera, con asistencia de las autoridades, presididas por el alcalde Julio González Hontoria, y en presencia de todos los alumnos, que previamente habían aprobado los correspondientes exámenes de ingreso, con lo que se procedía, al mismo tiempo, a la apertura del curso académico 1911-1912 .
Hay que recordar que en 1939 se separaron, en aulas diferentes, la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de la que independientemente sería, en lo sucesivo, Escuela Pericial de Comercio y mucho más tarde, en tiempos recientes, Escuela Universitaria de Estudios Empresariales, por las que han pasado, tanto como estudiantes de unas y otras asignaturas, la mayoría de los jerezanos, estudiosos de artes o de comercio.
En su aula magna se han celebrado numerosos actos, incluso un pregón de Semana Santa y, hace más de treinta años, recibió la visita del rey Juan Carlos I, siendo Príncipe de España, celebrándose con tal motivo una recepción oficial en su honor.
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