‘Jerezanos por Jerez’ era el nombre del partido de independientes que concurrió como tal en las elecciones municipales de 1991. El candidato a alcalde era el conocido medico Nicolás Rubio que tuvo la iniciativa de ir a la calle Rompechines, vía ahora desaparecida tras la amplia remodelación urbanística que se llevó a cabo en la plaza de Belén y los alrededores cuando en principio se iba a crear la Ciudad del Flamenco, que hoy es una amplia plaza.
Rubio tuvo la idea de ir allí a repartir preservativos a las prostitutas que ejercían su actividad en las viviendas situadas en esa calle. El objetivo de la acción, llamativa por aquel entonces, fue concienciar a estas mujeres del uso de condones en su actividad para la prevención de enfermedades y especialmente por el temido virus del Sida.
Nicolás Rubio llevaba en su programa electoral un programa específico destinado a este colectivo para la prevención de esta enfermedad, alegando que el Ayuntamiento no se preocupaba de llevar a cabo un control sanitario entre las prostitutas de Rompechapines.
El inquieto médico les explicó la importancia del uso de los preservativos y que no permitieras que sus ‘clientes’ no lo usaran. En esos diálogos, las mujeres con las que contactaron se quejaron de que el gobierno del PA les prometió atenderlas, “algo que no han cumplido pese a que fue una promesa electoral”, apostillaba el candidato que se comprometió a crear un programa especial para ellas.
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