"Detalles y vivencias" de una institución señera en la provincia

Las bodegas González Byass fueron ayer testigo de la presentación del libro 'Afanas. 50 años de recuerdos', una obra que lleva la firma de la periodista y escritora Begoña García González-Gordon y que se ha editado con motivo de la celebración de las bodas de plata de esta señera institución jerezana.

El acto, que fue conducido por Pedro Rollán, contó con la presencia del presidente de Afanas Jerez, Flaviano Valencia, la presidenta de Diputación, Irene García, el delegado territorial de educación Juan Luis Belizón y la presidenta de la Federación Provincial de Asociaciones a favor de Personas con Discapacidad Intelectual, Autismo y Parálisis Cerebral de Cádiz, María Luisa Escribano Toledo.

En este aniversario tan especial, Flaviano Valencia, presidente de Afanas Jerez, recordó "a aquellas personas a las que le tocó vivir situaciones dramáticas porque estaban mal vistas", pero que afortunadamente "con el trabajo de asociaciones como la nuestra ya eso es parte dela historia. Lo que realmente nos preocupa ahora es que esas personas se puedan integrar a nivel social".

Por su parte, la alcaldesa Mamen Sánchez aseguró que "para los jerezanos es un orgullo contar con esta asociación" y agradeció "el esfuerzo constante de todos las que la componen para hacer una vida mejor".

Con los mismos elogios se dirigió ante los medios Irene García, presidenta de Diputación quien abogó por la necesidad de que las administraciones apoyen a la sociedad civil en este tipo de instituciones.

La autora del libro, Begoña García González-Gordon, trató de acaparar el menor protagonismo posible, pero como perfecta conocedora de la materia, pues ha desarrollado una labor de colaboración con la entidad durante años, realizó un pequeño balance de estos cincuenta años. "No he querido firmar el libro porque Afanas es la única protagonista. Mi nombre está en el color de la portada, que es mi color favorito, y en la parte de mí que he puesto en él", apuntó.

Reproduciendo el contenido que se recoge en la contraportada prosiguió diciendo "este es el album de mi vida, con fotos, fechas, detalles y vivencias. Eso es lo único que pretende ser, una recopilación de recuerdos que traza la trayectoria de esta asociación desde sus modestísimos comienzos hasta hoy que ya ha cumplido medio siglo".

La escritora reconoció que se ha apostado por una edición "que lleve poco texto porque entiendo que muchas fotos con unas poquitas letras transmiten más cosas que un montón de letras con pocas fotos".

El libro sigue un contenido cronológico dividido en capítulos donde se dan respuestas "a las continuas necesidades de las personas con discapacidad intelectual; ese proceso es el que he querido plasmar en el libro".

En su recorrido por las distintas etapas fue nombrando a algunas de las que han sido piezas fundamentales de esta publicación y por supuesto, de estos 50 años. Así citó a Marie le Rider, a su madre María Dacia, a Carlos González Rivero, que regaló el terreno para la construcción del colegio, Mercedes Domecq, Paco Izquierdo, al mítico Peñita e incluso a algunas personas o instituciones "a las que por distintas circunstancias no he podido mencionar en el libro pero que realizan una labor envidiable. Hablo de gente como Eduardo Arcas, de Ondaluz Televisión y a todas las personas de cada centro que me han ayudado".