Día de ángeles guardianes

Representantes del Cuerpo Nacional de Policía procedentes de toda la provincia, así como miembros de la Guardia Civil y de los Ejércitos, se dieron cita ayer en Jerez con motivo del Día de la Policía, jornada conmemorativa que contó con una eucaristía concelebrada por el obispo de Jerez, desfile policial ante la Catedral, entrega de condecoraciones en el teatro Villamarta y una posterior convivencia en las Bodegas Diplomático.

La jornada comenzó a las 11 de la mañana en el primer templo jerezano, donde acudieron representaciones sociales y policiales, tales como el subdelegado del Gobierno, Francisco Calero, la vicepresidenta de la Diputación, Mercedes Colombo (el presidente Loaiza excusó su ausencia), el delegado del Gobierno de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, la alcaldesa de Jerez, García-Pelayo, que acudió con algunos de sus concejales (casos de Javier Durá, Antonio Real y Antonio Montero, entre otros) y la mayor parte de los comisarios locales de la provincia con la comisaria provincial, Concepción de la Vega, al frente. Tampoco faltó la Benemérita institución, con sus responsables en Jerez y Cádiz, caso del teniente coronel Rafael Alarcón, y el almirante de la Flota. La representación judicial con el juez decano, Juan José Parra, tampoco falló a tan destacado acto.

La eucaristía fue concelebrada por el obispo diocesano, monseñor José Mazuelos Pérez, junto con los miembros del Cabildo Catedral de Jerez, al frente de los cuales se encontraba el deán Antonio López. La eucaristía contó con bonitos detalles, caso por ejemplo de la ofrenda realizada por los hijos de los propios agentes que, ataviados con trajes regionales, ofrendaron flores ante la efigie de uno de los santos ángeles custodios. Tras la homilía y la comunión, el obispo diocesano agradeció la labor desarrollada por la asociación policial Santo Ángel, de la que dijo literalmente que “es una bendición de Dios”. “Este acto —dijo Mazuelos— ha sido una alegría para la Iglesia pues quienes lo organizan luchan por la dignidad del ser humano. Y ahí vamos juntos tanto lo creyentes como los no creyentes: en buscar el bien de la sociedad nos une”.

El acto religioso del Día de la Policía contó con varias capillas musicales. De un lado la que protagonizó Enrique Víctor de Mora a la voz y el órgano y, de otro, la banda del Tercio Sur de la Infantería de Marina, que interpretó la marcha ‘La muerte no es final’, el himno de los caídos por España. Especialmente emocionante resultó la interpretación de la composición mientras los numerosos miembros de los Ejércitos presentes en el acto cantaban la letra. Fue en ese momento cuando una representación de todos los servicios y departamentos del Cuerpo acompañaron a dos banderines que se postraron ante el lugar donde se depositó la corona de flores en honor a los caídos en la defensa de la Ley.

Apenas 25 minutos después de que concluyeran los actos en el entorno de la Catedral de Jerez comenzó en el Teatro Villamarta —instalaciones cedidas para la ocasión por el Ayuntamiento de Jerez— el acto de entrega de condecoraciones a los miembros del Cuerpo Nacional de Policía y otros cuerpos de la administración.

El acto contó con una presidencia de doce plazas sobre el escenario, donde se sentaron el subdelegado del Gobierno, Francisco Calero, el delegado de la Junta, Jiménez Barrios, la vicepresidenta de la Diputación, Mercedes Colombo, la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, la comisaria provincial, Concepción de Vega, el segundo comisario provincial, José Ramírez, y los comisarios de Jerez, Andrés Garrido, de San Fernando, José Antonio Postigo, de La Línea, Ángel Lozano y de El Puerto, además de la representación de la Armada Española.

La representación de la sociedad civil estuvo a cargo de José Antonio Zarzana, quien glosó la labor policial y recordó sus orígenes, en la Real Orden de 1824 mediante la cual Fernando VII creó la Policía General del Reino. Tras su intervención, fue condecorado por el Cuerpo Nacional de Policía.

En el transcurso del acto se entregaron numerosas condecoraciones. Así, el policía Francisco Miranda Navarro fue condecorado con la Orden al Mérito Policial con distintivo rojo. Junto a él, otros 52 policías fueron condecorados con distintivos blancos. Además, se entregaron distinciones a miembros del servicio administrativo, como Carmen Pina.

Ajenos al Cuerpo Nacional de Policía también fueron condecorados la fiscal antidroga de Jerez, María Ángeles González Roldán, el jefe de Cría Caballar de Jerez, Isidoro Vargas; Emilio Miró, fiscal antidroga del Campo de Gibraltar, Juan Luis Moreno, fiscal de Cádiz, Antonio Rivas, inspector de la Policía Local de Cádiz, la periodista Lalia González-Santiago, José Manuel Bueno, capitán de Fragata, y Rafael Alarcón, teniente coronel de la Guardia Civil. Igualmente, también fueron condecorados, en esta ocasión con la medalla de oro del Cuerpo Nacional de Policía, la alcaldesa de Jerez, María José García-Pelayo, y el conde de Osborne, Tomás Osborne.

Fue el veterano policía Alfonso Rodríguez-Candela, con 35 años de servicio a sus espaldas, quien representó a todos los agentes distinguidos en el acto. Este veterano agente, garante de la seguridad en numerosísimos derbis futbolísticos, no dudó un instante en dedicar la condecoración tanto a los compañeros como a sus familias.