El centro educativo Laude Altillo School cuenta desde ya con nuevas instalaciones destinadas a Educación Infantil. El estreno de este flamante edificio contó con la presencia de autoridades políticas, regionales y locales, además de una representación de la cadena International School Partnership.

Fue en primer lugar la directora del Altillo, Vanessa L. Moore, la encargada de dar la bienvenida a los asistentes, entre ellos muchos padres y madres de alumnos, para posteriormente dejar paso a María José García-Pelayo, diputada nacional, quien felicitó al centro “porque no os conformáis”, al tiempo que agradeció su labor “porque no sólo lo conforman grandes personas, sino también una gran calidad educativa”.

Orgulloso del Altillo School se mostró Nick Rugg, director en Europa de la cadena International School Partnership, en la que está incluido el centro. Rugg felicitó “a todos los que han participado en la construcción de este edificio”, y destacó “la importancia que tienen los primeros años de educación, creemos firmemente en que es una etapa fundamental en el desarrollo y el aprendizaje”.

Por su parte, Juan Antonio Cabello, delegado de Educación, docente de profesión, insistió en “la filosofía” de Altillo School, ensalzando su metodología “basa en proyectos”, los idiomas y el desarrollo “de habilidades comunicativas”. Concluyó diciendo que “un buen proyecto educativo es el que marca la diferencia”.

Antes de la interpretación por parte de los más pequeños de una de las canciones preparadas para el día de la paz, Juan Marín, vicepresidente de la Junta, cerró el acto con un discurso escueto en el que se refirió a la educación“como la mejor herramienta para cambiar el mundo” y de paso elogiar “la labor de los docentes”.

Este nuevo edificio ‘Early years’ está dedicado exclusivamente a la etapa Infantil, una etapa que en Altillo School comienza desde el primer año de vida. De hecho, con la inauguración de esta nueva instalación, el centro puede acoger ya a pequeños que van desde los 10 meses a los 5 años. 

De hecho, su estructura y diseño se centra específicamente en fomentar el desarrollo cognitivo, con espacios abiertos que estimulen la curiosidad y la sensibilidad de los más pequeños, dejándoles explorar sin riesgo, toda la zona que les rodea. Además, desde los dos años el alumnado convive con una profesora de habla inglesa.

El Laude Altillo School es un centro pionero en la innovación en la enseñanza, y ha sido capaz de inculcar dentro de su proyecto educativo metodologías como el uso de la fonética para la lecto-escritura y el método ABN de matemáticas.

Asimismo, destaca por el énfasis que se aplica desde los primeros años de escolarización al desarrollo de la comunicación y el lenguaje, la psicomotricidad, el desarrollo creativo y la autonomía del alumno.