Jerez cierra una de las motoradas más tranquilas de los últimos años, marcada por una menor asistencia de público al circuito -así lo confirmó la empresa organizadora Dorna-, menor gasto, dicen responsables de talleres y bares, y la práctica ausencia de incidentes graves. En cuanto al tráfico, ni una sola víctima mortal en la provincia. El SAS informó que la concentración se ha saldado con más de 30 heridos leves y dos graves por accidentes de circulación. Precisamente uno de los segundos es un vecino de Jerez de 40 años que se accidentó en la ciudad y que permanece en la UCI del hospital Puerta del Mar, experimentando una buena evolución; mientras que el otro es un hombre que iba a trabajar y que fue arrollado por un vehículo que se dio a la fuga en Chiclana a primera hora de la mañana de ayer, indicó Tráfico. También está ingresado en la UCI.

Ante esta ausencia de incidentes graves, el subdelegado del Gobierno, Sebastián Saucedo, se mostró en el circuito "gratamente sorprendido. La Guardia Civil me ha dicho que habido una absoluta normalidad. Ha calado nuestro mensaje pedagógico de los últimos años y la gente viene muy concienciada de que hay respetar las normas. Hemos tenido menos incidentes que en un fin de semana de verano en la provincia". Incluso esta edición han descendido de forma notable los casos positivos de alcoholemia o consumo de drogas en los controles que ha desarrollado la Guardia Civil. También se han cursado denuncias por hurto de carteras, gasolina  y cascos.

El consejero de Turismo y Deporte de  la Junta, Luciano Alonso, indicó que "la asistencia es buena, con una aportación masiva de turismo nacional. Hay que tener en cuenta que hay una grave crisis económica,  pero hoy estamos contentos porque este fin de semana Andalucía es la capital del deporte con el Gran Premio de Jerez y el Open de golf en Sevilla, al que han ido más  de 45.000 personas. Andalucía está demostrando su capacidad para organizar grandes eventos deportivos".

El dispositivo de tráfico parece que funcionó a nivel muy alto especialmente los accesos: apenas se tardaba 25 minutos del centro de Jerez al aparcamiento número 2 del circuito, junto a la torre 'Tío Pepe', mientras que la evacuación posterior fue más lenta ante la masiva salida de aficionados. A las cuatro de la tarde la Dirección General de Tráfico (DGT) tenía en nivel amarillo -circulación irregular con retenciones- la autovía Jerez-Arcos. La situación fue mejorando gradualmente pero se complicó en la AP-4, que estaba en el mismo nivel sobre las siete de la tarde. Tráfico ya midió el sábado 175.000 movimientos en el entorno del circuito, un "3% menos que el año pasado", indicó Sebastián Saucedo.

Una vez más la asociación de agentes de la Guardia Civil (AUGC) criticó que "otra vez, año tras año, volvieron a repetirse las nefastas condiciones de trabajo que tienen que sufrir, en exclusiva, los guardias. Por fin, y tras varios años batallando, se ha conseguido que habiliten un módulo para que los guardias civiles puedan disponer de unas condiciones dignas:  luz para tener agua fresca y una zona adecuada para el descanso".

La alcaldesa Pilar Sánchez coincidió en valorar muy positivamente el desarrollo del Gran Premio subrayando que "será muy difícil superar los éxitos de este año tanto en lo deportivo como en la organización, donde todo ha sido espectacular con el podium para tres españoles y con el funcionamiento de los dispositivos de forma que ha sido posible evitar incidentes de extrema gravedad". No obstante, la regidora jerezana adelantó que los retos de superación siguen presentes y que para 2011 "seguiremos trabajando para conseguir superar este año", confiando en que "si hace poco tiempo nos dieron el premio al mejor campeonato celebrado en el mundo en 2009, este año estoy convencida de que este galardón volverá a Jerez".  Para la alcaldesa, el ambiente en Jerez "sigue marcando las diferencias como bien se pudo escuchar al final de las carreras cuando el público gritaba Jerez, Jerez".

En la madruagada del domingo, el incidente más destacable fue la actuación de unos vándalos que causaron daños en más de una decena de vehículos tirándoles objetos desde un piso de la urbanización Parque Atlántico. La Policía Local identificó a los dos supuestos autores.