Grecia y Roma en las etiquetas
El Rebusco
Imágenes con historia
Las bodegas del Marco del jerez recuerdan al mundo clásico
Dedicado a mi amigo Carmelo García Barroso
No queda lejos el tiempo en el que las misas se celebraban en latín. Un recuerdo vivo de la cultura que Roma difundió por toda Europa, y que hunde sus raíces en la Grecia clásica. El griego, el latín, y el Derecho romano, aún se estudian en los centros educativos.
Si observamos con detalle la toponimia de nuestros pagos de viñas algunos de sus nombres nos recordaran que esas haciendas fueron en sus orígenes villas de ricos patricios romanos. Y la misma ciudad de Asta Regia, de actualidad en estos días, esconde bajo tierra un rico patrimonio romano. Algunas de sus piezas se exhiben en el Museo Arqueológico.
Símbolos de la identidad andaluza, como su bandera, recrean la figura del legendario Hércules, al que se le rendía culto por esta parte de Cádiz.
Y es una escultura de ese mismo dios griego, junto a la de Julio César, las que están representadas en la fachada del actual Consistorio jerezano, en la misma plaza de Escribanos.
Los atributos de otro dios pagano, Mercurio, adornan la fachada de la actual Biblioteca Municipal, al igual que su rostro se nos muestra en la forja de hierro de alguna que otra bodega, como las que existen en calle Muro.
En Jerez, ciudad del vino, no podía faltar la imagen del dios Baco. Una de ellas la podemos contemplar en la parte superior del frontal de las bodegas que llevan su nombre, las que se encuentran en la calle Ferrocarril.
La otra, ya desaparecida, estaba sobre el portalón de líneas clásicas existente en la zona ajardinada de las bodegas Domecq, en Puerta de Rota.
Algunas de esas pistas 'ocultas' de la tradición clásica greco-latina nos las descubre el investigador Juan Luis Sánchez Villanueva en su libro Monumentos con Arte: Jerez.
El latín aparece con frecuencia en los lemas de compañías bodegueras, o bien orlando los escudos nobiliarios de familias jerezanas involucradas en el negocio del vino. Distintivos heráldicos que se reproducirán en el etiquetado de sus marcas vinateras.
Los que vinieron después no pudieron destruir la huella dejada por estas dos civilizaciones. Su historia, sus emperadores, sus literatos y filósofos, y los mitos paganos, pervivieron con el paso de los siglos, hasta hoy.
Ya lo decía Estrabón, que escribía entre la época de Augusto y la de Tiberio: los turdetanos, sobre todo los próximos al Betis, se han convertido completamente al modo de vida de los romanos.
Lo que nos cuentan las etiquetas
Para tratar del etiquetado del Marco del jerez siempre hay que recurrir al espléndido trabajo de la sanluqueña Ana Gómez, que ha visto la luz hace unos años en formato libro, las dos primeros volúmenes ya están a la venta.
Imprescindibles, también, los artículos del profesor de la Universidad de Cádiz, Alberto Ramos.
Sin embargo, no es mucho lo tratado sobre la representación de Grecia y Roma en el etiquetado de los vinos de la zona. No es fácil rastrear las etiquetas generadas por las bodegas del Marco, las impresas entre finales del XIX hasta nuestros días, donde se visualice este peculiar imaginario del mundo antiguo.
Aquí he traído una pequeña muestra, donde aparecen dioses, generales, emperadores, arquitectura y textos latinos, que confirma esta permanencia en nuestro entorno, en un aspecto tan cotidiano que puede pasar desapercibido: las etiquetas de vinos y brandies.
Podría ser una forma amena de enseñar a los estudiantes de Jerez la Historia, añadiendo un aspecto local poco tratado.
Latín y arte
Muchas bodegas del Marco perpetuaron ese recuerdo al dar nombre a algunos de sus productos, ya fueran vinos o brandies. Los lemas de algunas eran en latín, como la de la marca Ánfora, de Saltalamauhia y Cia. En la banda que rodea la bella ánfora se lee: Sine Labor et Honestas Nihil.
En el curioso diseño de otra, para un anís, en el círculo que rodea la copa que está sobre un barril está estampada la frase: Labor Improba Omnia Vincit.
La de las bodegas jerezanas de E. Librero recogía en su logo, sobre las páginas de un libro abierto, una supuesta frase firmada por Cicerón: Sin economía, ni trabajo, no hay riqueza.
Otras, en cambio, adornan sus escudos heráldicos, impresos en la etiqueta, con los lemas de la familia. Tal es el caso de los Isasi con Vincit Amor Patria; o la de Antonio Camacho Rivero con esta otra: Fortis et Hospitalis.
Delgado Zuleta aún conserva una de sus marcas más emblemáticas, el amontillado ¿Quo Vadis?. En su etiqueta se ha querido mantener, hasta hoy día, el error evidente del signo de interrogación, que en latín no existe.
Al parecer el nombre de la marca vino sugerido por la zarzuela del mismo nombre, estrenada en Madrid en 1901.
La arquitectura griega nos viene de la mano del anís Magigal, con una litografía romboidal de suaves colores, en ella los restos de un templo pagano sobre una colina cercana al mar.
Y el coñac Las termas, de Luis G. Gordon y Doz, con el interior de un singular balneario romano decorado de esculturas.
De dioses
Los nombres de los dioses paganos de Grecia y Roma, con su complicada genealogía, han llegado hasta nosotros. Uno de los más renombrados es Hércules, con especiales vínculos con esta parte de Andalucía.
Su nombre y su poderosa figura es una de las más recurridas por las bodegas, ya sea en el jerez quina de Eduardo Bohorques, como en los vinos de Vicente Romero Villarreal, de Sanlúcar, y Miguel M. Gómez, de Cádiz.
El dios Cronos, por eso del tiempo que necesita el jerez para envejecer, es otro de los habituales, al igual que el dios Baco, el Dionysos griego, figura vinculada a la fertilidad y al vino.
Del primero hay ejemplos en el amontillado de Juan Valencia, con su marca Las doce. El barbudo dios aparece recostado junto a un reloj de arena y la guadaña.
Y las bodegas de Barón de Algar, como la de Morales, promocionaron sus vinos con esta imagen.
De Baco hay dos llamativos ejemplos, con diseños de famosos artistas, uno italiano y otro español. Las Bodegas Valdespino encargó al famoso cartelista, Leoneto Cappiello, la creación de un jovial rostro de Baco rodeado de pampanos de vid.
Por su parte, la de Marqués del Merito hizo lo mismo al convocar a Federico Ribas para hacer uno de los mas bellos carteles: un joven y esbelto Baco recolectando el fruto de una parra, pintado con un intenso contraste de colores de rojo y negro.
El dios Anfitrión, símbolo de la hospitalidad, en el brandy de Barón de Algar.
Entre mitos femeninos cabe mencionar a Cibeles, relacionada con Baco, de Bodegas Villagrán. Debajo del texto se ve el grupo escultórico que de esta diosa hay en una céntrica plaza de Madrid.
Otras diosas menores que encontramos en esta relación son las de Pandora, de José Estévez, y Fortuna.
De hombres
Algunas de las grandes figuras que dieron Grecia y Roma, con categoría de dioses, o semidioses, se inmortalizan en estas pequeñas piezas de papel pegadas a las botellas. Tan frágiles y efímeras.
Para el rey espartano Leónidas, el coñac de Luis León Cruz recurre a la escultura del hoplita herido, apoyado en su escudo, del frontón de un conocido templo griego.
El mítico fundador de Roma, Rómulo, en un vinagre de Jerez, con la recurrente loba amamantándole a él y a su hermano Remo.
Y al divino Julio César, que se paseo por estas tierras, en Manuel Gil Galán, con su ferruginoso quinado que lleva su nombre. La escultura de cuerpo entero sobre un podio decorado destaca en el conjunto.
Su memoria será tan poderosa, hay un mes en el calendario que lo recuerda, que el emperador Carlos I, y V del Sacro Imperio Romano Germánico, era apodado el César. Así se comprueba en el brandy de Sánchez Romate.
El brandy Trajano, de Vicente Romero Villarreal, es un homenaje a este emperador nacido en Itálica. Una moneda acuñada con sus perfil centra la composición.
Finalmente, la figura de un gladiador, vencedor en la arena de un circo, lo tenemos en el brandy Gladiador, de Marqués Real Tesoro. Momento que nos recuerda el cuadro del pintor francés Gerome, Pollice verso.
Más evidente es el origen de la etiqueta del tónico Faurel, inspirada en la obra del pintor Ricardo López Cabrera, de 1888, con un musculoso y desafiante gladiador saludando a la tribuna.
También te puede interesar