El Ayuntamiento de Guadalcacín ha tomado la decisión de suspender la Feria de la Tapa que habitualmente se celebra el primer fin de semana de junio y que este año cumplía su IX edición, así como la de establecer medidas de incentivos de su sector hostelero para paliar los efectos de estos dos meses de obligado cierre debido a la pandemia del Covid-19.

Ambas circunstancias fueron comunicadas este pasado viernes por el equipo de gobierno guadalcacileño al sector hostelero de la entidad local. "Se trata de un acto de responsabilidad", ha explicado la alcaldesa, Nieves Mendoza. "Por un lado, en estos momentos no podemos garantizar la normalidad del desarrollo de la Feria, en una situación de apertura paulatina del confinamiento y de distancia social. Por otro, tenemos que colaborar, en la medida de nuestras posibilidades, a que todos los sectores comerciales y económicos de la entidad local puedan recuperar su espacio y la normalidad, dentro de la situación excepcional en la que seguimos viviendo y que puede eventualmente retroceder".

En concreto, con respecto al sector hostelero, el Ayuntamiento de Guadalcacín ha previsto tres medidas de distinta índole. En primer lugar, no se cobrará la tasa de veladores en 2020. En segundo, se ha previsto facilitar la ampliación del espacio tanto de veladores como de aparcamientos para colaborar con las medidas de aforo limitado. Finalmente, se han previsto subvenciones para los autónomos de la hostelería.

A partir de este lunes, desde el Ayuntamiento de la entidad local se ha previsto también, ir abordando medidas similares mediante reuniones con otras áreas de negocio y con el resto de comerciantes de Guadalcacín.