Huelgas eternas

Nada menos que 92 días de huelga cumple hoy el servicio de transporte urbano de la ciudad desde que los empleados de Urbanos Amarillos, hartos de no cobrar sus salarios, comenzaron unos paros que han batido el triste récord de la huelga anterior que se prolongó doce semanas. En este tiempo, el jerezano de a pie —y nunca mejor dicho— se ha acostumbrado a ir andando de un lado a otro de la ciudad, a pedir favores a vecinos o conocidos para que los acerquen a algún sitio, a coger taxis —los que puedan costeárselo— o simplemente, a no desplazarse con tanta frecuencia. Hoy puede ser un día clave para la solución del conflicto, ya que se cumple el ultimátum dado por el Ayuntamiento a la empresa para que normalizara el servicio. La empresa, según publica este diario en la página 11 de hoy, presentará alegaciones a este plazo. Por el bien de usuarios y comerciantes, más vale que el problema tenga una pronta solución.