El Taller de Fiestas de Jerez se ha convertido en las últimas semanas en el lugar en el que reposan los nombres más insignes de Jerez. Allí, los operarios municipales dedican horas y horas a que los rótulos antiguos de la ciudad puedan volver a lucir como antaño. La idea es ir dando poco a poco respuesta a la reivindicación de la Mesa del Centro Histórico, cuyos colectivos han denunciado en numerosas ocasiones el grave deterioro que sufrían los letreros que forman parte del callejero histórico de la ciudad.

Precisamente por ello, el Ayuntamiento de Jerez anunció en enero que se había iniciado ya la primera fase de la recuperación de estos rótulos a través de la Tenencia de Alcaldía de Servicios Públicos, que dirige Jaime Espinar.

En concreto, la actuación ya iniciada consiste en "la reparación y adecuación de los rótulos desde Infraestructuras para que Jerez tenga una imagen cuidada y que preserve nuestra esencia y también nuestra historia”.

Tal como explicaron desde el gobierno local, son muchos los rótulos del callejero histórico del centro que se han perdido en los últimos años. Por ello, se ha realizado un inventario con los que faltan y, dentro de esta primera fase, ya se han podido recuperar los de Juana de Dios Lacoste, Juan Capitán, Carrizosa y Parada y Barreto, este último instalado en su lugar de origen este pasado viernes.

Tres fórmulas para la recuperación de los rótulos antiguos de Jerez

Jaime Espinar recuerda que, al poco tiempo de entrar el PP en el gobierno local, dentro de las visitas que realizó como delegado, visitó una de las naves del Ayuntamiento de Jerez y encontró “una serie de letreros en una esquina, en un estado deplorable. Rótulos que en un momento determinado se quitaron por obras o por mal estado y nunca más se volvieron a colocar”.

Fue entonces cuando el gobierno local tomó la decisión de que Infraestructuras llevara a cabo los trabajos de recuperación de los rótulos de las calles históricas, a través del taller de pintura. Una demanda que también había llegado a Agustín Muñoz, a través de los colectivos del Centro Histórico que le habían planteado un listado de calles donde debían reponerse dichos carteles.

Para poder recuperar el callejero, desde el gobierno local se está trabajando en tres líneas diferentes. En primer lugar, “todas esas placas de los rótulos que estaban arrumbadas allí en Infraestructuras las estamos arreglando”.

Sin embargo, en los casos en los casos en los que los nombres continúan en su lugar de origen pero en mal estado, se están adecentando allí mismo. Es lo que ha ocurrido en la plaza Rafael Rivero y lo que ocurrirá próximamente en la plaza del Arenal o en san Miguel.

La tercera fórmula es que para “aquellas calles en las que se han perdido los rótulos, porque nunca se recuperaron, vamos a a encargar una nueva rotulación con el mismo diseño pero con un material diferente”, adelanta Espinar. En primer lugar, porque los rótulos históricos están realizados con una mezcla compuesta de hierro y otros materiales que no se han podido identificar y, en segundo lugar, porque se trata de placas muy pesadas.

Por ello, para evitar cualquier tipo de peligro, la nueva señalización será de un material mucho más ligero, una vez que sea aprobada por la comisión de Patrimonio. Esto hará que su reposición sea más económica y más segura, ya que serán atornilladas a la pared. Igualmente, los rótulos que se restauren serán asegurados, garantizando su pemanencia.

La recuperación del callejero se realizará a lo largo de muchos meses, “ya que esto no es un trabajo de unos pocos días”, pero el objetivo es que todo el centro histórico vuelva a contar con su rotulación original o lo más parecido a ella para “recuperar nuestra esencia”, insiste Espinar.