Jerez cerró 2021 con cerca de 1.950 accidentes laborales y seis muertos, lo que la sitúa como la segunda ciudad andaluza con más siniestros mortales por detrás de Málaga, con doce, y por delante de Sevilla y Córdoba, en las que se registraron cinco y cuatro, respectivamente. 

CCOO y UGT de Jerez muestra su solidaridad y apoyo a las familias de estros trabajadores fallecidos y que fueron víctimas de accidentes laborales en 2021 durante la concentración celebrada en la plaza del Arenal este 28 de abril, Día Internacional de la Salud y la Seguridad en el Trabajo.

¿Qué ocurre en Jerez con la Prevención de Riesgos Laborales y la Seguridad en el Trabajo?, se preguntan las centrales sindicales, que cuestionan la actividad preventiva de las empresas ante los altos índices de siniestralidad registrados en el municipio jerezano, donde de los 1.948 accidentes totales registrados el año pasado, 233 fueron in itinere -en el trayecto entre el trabajo y el lugar de residencia-, 1.920 leves y 22 graves.

Según los datos facilitados por los sindicatos, Jerez acapara uno de cada seis accidentes laborales ocurridos en la provincia (16,20%) y uno de cada cuatro fallecidos (24%). La siniestralidad laboral, que acumula una década sin descenso, registró un repunte del 18% en el último año en España, donde se rebasaron los 1,3 millones de accidentes de trabajo, 700 de ellos mortales. Andalucía, con 148 de los fallecidos, supone casi el 21% del total a nivel estatal.

"Año a año siguen produciéndose muertes por causas fácilmente previsibles y evitables como caídas de altura, golpes o atrapamientos", indican CCOO y UGT de Jerez, al tiempo que señalan que "tras dos años de pandemia, se ha puesto de manifiesto que la salud pública y la salud laboral deben de ir de la mano".

Responsables sindicales durante la concentración en el Arenal

Los sindicatos reclaman que los casos de Covid persistente se incluyan en el listado de enfermedades profesionales y lamentan que las patologías derivadas de la exposición a los riesgos psicosociales no se consideren como enfermedad profesional y los trastornos mentales apenas se notifiquen como accidentes de trabajo.

La elevada siniestralidad y su incremento paulatino debe servir, prosiguen los sindicatos, para "llamar la atención a la clase trabajadora, a sus representantes, a los delegados de Prevención y a los sindicatos para exigir el cumplimiento de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales (LPRL)", así como "a los empresarios y patronales para que pongan remedio, porque aquí hay responsabilidades de gran calado y se está subestimando la accidentabilidad en las empresas y desinvirtiendo en prevención", y "a las autoridades y a la Inspección de Trabajo, para que pongan en marcha las medidas necesarias para poner fin a esta situación insostenible". Finalmente, apostillan, "desde los Gobiernos estatal y autonómicos hay que impulsar decididamente políticas públicas de prevención y de inspección".

CCOO y UGT denuncian que "el procedimiento de notificación y registro de las enfermedades profesionales es absolutamente inoperante, privando a las personas trabajadoras del reconocimiento del origen laboral de las enfermedades y del acceso a las prestaciones correspondientes, especialmente en los cánceres de origen laboral, cuando las estimaciones más prudentes elevan a más de 10.000 casos anuales el cáncer 'laboral' en España". Las centrales sindicales consideran "escandaloso" el caso del amianto, para el que no existe una estrategia estatal de erradicación pese a que lleva 20 años prohibido, sin que se haya aprobado tampoco el fondo de compensación a las víctimas.

"El Gobierno debe abrir una mesa de diálogo social para poner el foco en la prevención de riesgos laborales y en las condiciones de salud y seguridad en los centros de trabajo; revertir las normas que permitieron asumir la prevención al empresario en las empresas de hasta 25 personas trabajadoras; incorporar la perspectiva de género y los riesgos derivados de la organización del trabajo (digitalización, inteligencia artificial, plataformas...) y los riesgos psicosociales derivados, así como los efectos del cambio climático".

Del mismo modo, los sindicato piden que se amplíen los recursos humanos y materiales de la ITSS, INSS y de los Técnicos Habilitados de la Junta de Andalucía y de la Fiscalía; crear el delegado de prevención territorial y sectorial para las empresas que no disponen de representación sindical, actualizar el cuadro de enfermedades profesionales y cambiar el sistema de notificación; y establecer la estrategia andaluza de seguridad y salud en el trabajo.