Linesur se suma a la huelga de autobuses a partir del 15 de agosto

El servicio de autobuses de la ciudad vuelve a ser noticia. A la huelga indefinida anunciada la pasada semana por Urbanos Amarillos, ahora se suma la de Linesur, concesionaria que da servicio a pedanías y barriadas rurales. Así lo confirmó ayer el presidente del comité, Alejandro Gómez, quien denunció que la plantilla sólo ha cobrado la mitad de la nómina de junio, faltando la extra y sin garantizar el salario de julio. "No nos queda otra que convocar huelga para mediados de agosto. La empresa nos ha dicho que no hay dinero para nada, así que empezamos a movernos ya", declaró el representante de los trabajadores.

La situación "límite" de esta concesionaria llega a tales extremos que "la dirección de Linesur nos ha dicho que si nos pagara ahora la otra mitad de junio no habría dinero ni para gasoil", apuntó Gómez, quien añadió que "hemos esperado a confirmar la huelga lo máximo posible, incluso le dijimos a la empresa que la extra no nos la pagara ahora, que se podía negociar para que se ingresara en otro momento, pero ni eso nos salva".

Tras la confirmación de la huelga indefinida del transporte rural, la plantilla mantendrá varias asambleas a primero de agosto para concretar el calendario de movilizaciones y decidir el día de inicio de la protesta. "Estamos cansados porque es el cuento de nunca acabar. Hay muchos compañeros que sus familias dependen sólo de este sueldo y así no se puede vivir", remarcó el presidente del comité. La convocatoria afectaría en principio al servicio de la zona rural -12 autobuses- aunque "si la cosa no mejora podría ampliarse a las líneas que van a Trebujena, Chipiona, San José del Valle, Sanlúcar... Todo puede pasar, pero esperamos que alguien nos eche un mano y así evitar la huelga", declaró Gómez.

La huelga que sí tiene fecha de inicio es la de Urbanos Amarillos. El comité de empresa recordó ayer que la movilización será de lunes a viernes desde el 8 de agosto y podría durar "muchísimo tiempo si la empresa no cumple el 100% del convenio". El presidente del comité, José María Romero, denunció que la concesionaria sólo lleva en la ciudad nueve meses y "hemos tenido ya 26 días de huelga y ningún mes hemos cobrado en tiempo y forma. El salario, la jornada de trabajo, los uniformes... Todo lo está incumpliendo y estamos hartos".

Pero según el comité no sólo se está faltando a los artículos del convenio de los trabajadores, además Urbanos Amarillos "no ha puesto ni un sólo céntimo por el canon ni por el uso de los autobuses de Cojetusa". Así, Romero añadió que el canon de la concesión es de 1,3 millones de euros y el de uso de los vehículos de la empresa anterior, de 1,9 millones. El resultado de este "impago" provoca que los administradores concursales de Cojetusa no puedan afrontar los atrasos que mantienen con la plantilla, y que abarcan entre los 5.000 y los 7.000 euros por trabajador.

"Mientras Urbanos Amarillos no cumpla habrá huelga. De hecho, si llega el 8 de agosto y nos faltan los cordones de los zapatos, habrá huelga", afirmó rotundo el presidente del comité. Igual de firme se mostró el secretario, Juan González, quien remarcó que la plantilla "no quiere la municipalización. Sólo queremos una empresa solvente, que se haga cargo de verdad del transporte urbano y ponga autobuses nuevos". Pero el comité no se quedó en los 'aspectos técnicos' sino que resaltó la crisis de muchos trabajadores. "La plantilla está mal, hay compañeros de baja por ansiedad y ya hemos dicho basta", apuntó González, mientras que el portavoz, Ángel Morales, señaló que "cuando decidimos ir a la huelga es porque no tenemos otra solución. Pedimos perdón a la ciudadanía por las molestias que esta protesta le pueda ocasionar, pero creo que hay motivos más que justificados para convocarla".

Por último, el secretario local de CCOO, José Manuel Trillo, lanzó un mensaje al gobierno local para que "no haga la misma campaña de descrédito que la antigua alcaldesa, Pilar Sánchez, y no ataque a la plantilla por su salario y poniendo a los jerezanos en su contra. El Ayuntamiento debe de actuar como mediador del conflicto y facilitar todo lo que sea posible para que estos trabajadores cobren sus nóminas". Asimismo, Trillo confía en que los comerciantes y asociaciones vecinales vuelvan a sentarse con el comité de Urbanos Amarillos "antes de que se posicionen al lado de la empresa". La próxima cita importante de esta plantilla es mañana cuando conozcan los servicios mínimos establecidos para la huelga.