El casco histórico de Jerez tiene un 'plan b'
Ciudadanos, amantes del patrimonio, presentan al Ayuntamiento un documento en el que desgranan una serie de propuestas culturales y turísticas para San Mateo, San Lucas y su entorno
Apuestan por el emparrado de las calles, no modernizar determinados espacios y convertir la plaza del Mercado en el centro verdadero de la ciudad
Jerez, ciudad arbolada, ciudad emparrada (I)
Jerez/Un grupo de ciudadanos, amantes de Jerez y su patrimonio, han enviado al Ayuntamiento de Jerez un elaborado documento con una serie de propuestas para la recuperación del casco histórico. Entre los nombres de dichos vecinos se encuentran el pintor Juan Ángel González de la Calle, el arquitecto Miguel Rebuelta González, el abogado Guillermo Rebuelta González, el técnico superior en Paisajismo Esteban García del Salto y el economista Juan Luis Vega.
"Como la mismísima Cartuja, el monumento más importante de la provincia, y como su vecino, el río Guadalete, que significa precisamente río del olvido, el viejo casco urbano de Jerez, la ciudad intramuros de origen almohade (S. XI) lleva descuidada y abandonada decenas y decenas de años, pese a ser una verdadera maravilla. Callejuelas bellamente empedradas, fachadas de palacios de singular belleza, aunque dejados de la mano de Dios como los de Riquelme o San Blas, de iglesias como San Juan de los Caballeros, de extraordinario y gran ábside gótico mudéjar y su histórica capilla de la Jura de los Caballeros Veinticuatro, la altísima bóveda de crucería e igualmente gótica tardía de San Mateo, el extraordinario retablo de San Marcos, una obra maestra incrustada en otra soberbia bóveda nervada y la vetusta, pero formidable, San Lucas, que ni siquiera sabemos lo que atesora por dentro", apuntan como introducción.
Creen que la solución pasa por tres fases: recuperación del espacio, un plan para el disfrute de los jerezanos y uno para atraer el turismo a esos lugares.
Recuperar el espacio
Los italianos, extraordinarios artistas y expertos en comercialización de sus productos, es decir en marketing turístico, gastronómico, enológico, de moda, etc., inventaron un concepto para atraer a los visitantes a su país: 'la decadencia es bella'. Querían significar con ello que lo antiguo, los monumentos, las piedras de su gran pasado, era algo que debía contemplarse en el estado en que se hallaban ahora, no modificar nada, pero eso sí, contando una historia de cada espacio, casi de cada piedra y que, naturalmente, siempre resultara interesante. Los restos de edificaciones como el coliseo romano, o las fachadas sucias de los canales de Venecia, había que contemplarlos imaginando a gladiadores luchando contra fieros leones traídos de Egipto, que alguien se enamorara de ti montado en una góndola, casi con la misma pasión de Romeo y Julieta en la vecina Verona.
"Y eso mismo, -dicen en su programa, salvando las diferencias-, es lo que hay que crear, imaginar, en el barrio llamado de San Mateo, no borrar nada, no convertirlo en un espacio moderno, sino que mantenga siempre su pasado feudal. Callejuelas torcidas, desconchones, antiguas bodegas, llenas de telarañas y soltando aromas imposibles. Preciosos suelos de piedras intactos, tal como pisaron judíos, musulmanes y cristianos. Y aquí, de pronto, aparece una gran iglesia llena de tesoros arquitectónicos, una plaza que fue centro del pueblo, el lienzo de una muralla almohade, un cante por seguiriyas que se escucha desde un tabanco, algo que conmueve el alma. Más allá podrán visitar el museo de Lola Flores, el nuevo Museo del Flamenco, tomar una copa de oloroso en una terraza emparrada o presenciar un espectáculo flamenco en una peña, el baile estremecedor de una bailaora gitana".
Proponen "tan solo recuperar fachadas como la de Riquelme y cubrir casi todas las calles, las que se puedan, con algo tan único, tan nuestro, como las parras de la vid. La ciudad antigua del vino, el origen del Jerez, el comienzo de lo que fue, intacta, nuestra ciudad primitiva. Podría optarse por llevar a cabo un concurso de reconocidos arquitectos, pero ese tema tardaría mucho tiempo y finalmente se optaría seguramente por lo mismo, por mantener el barrio viejo tal como está, así de bonito".
Disfrute de los jerezanos
¿Y cómo se consigue eso? ¿Cómo se logra recuperar que primero los habitantes de la propia ciudad vuelvan a un lugar que ahora les parece muerto?
"Pues parece muy difícil, pero tiene una solución relativamente sencilla: convertir la plaza del Mercado en el centro verdadero de la ciudad", apuestan estos vecinos.
Para ello, apuntan que el palacio Riquelme "debe plantearse como la sede de la Delegación de Cultura y Fiestas de la Ciudad, Promoción o quizá en una gran pinacoteca, con una colección de los grandes pintores jerezanos. Una oficina que centre una actividad frenética, casi diaria, que cree sin parar actividades en su entorno".
Y plantean la recuperación de los 'Tosantos'. Este mercadillo de frutos y flores de otoño se celebrada en muchas poblaciones andaluzas coincidiendo con la recolección de frutas del otoño, tales como naranjas, membrillos y peros de todas las clases, castañas y nueces, uvas y muchas flores, sobre todo crisantemos. Decorando muy bien cada puesto se colocaban en lugares anexos de las plazas de abastos y atraían a centenares de personas. "Podría recuperarse justamente en la plaza del Mercado. El Ayuntamiento montaría un escenario medieval con tenderetes cubiertos con colores de esa época, que se alquilarían a los fruteros y tiendas de flores de la ciudad. Podría crearse un premio al puesto mejor decorado cada año".
Las zambombas de la plaza del Mercado. "También podían celebrarse simultánea o alternativamente en la plaza Belén y con el objetivo de que los jerezanos se adentren en el corazón del barrio viejo emparrado. Habría que iluminar majestuosamente esos lugares y las calles anexas y celebrarlas desde finales de noviembre hasta el día 24 de diciembre cuando se conmemoraría la pre Nochebuena. Podría proponerse algún premio a la mejor zambomba del año para estimular el trabajo de cada asociación participante".
El retorno de las cofradías por el barrio antiguo. "Las cofradías con sede en el barrio viejo deberían regresar todas por calles estrechas, poco iluminadas y olvidarse de la zona extramuros, iluminadas y frías. Sería entonces una Semana Santa diferenciada de todas las de su entorno y llenaría de publico y visitantes a ese espacio. Se sabe que las hermandades son muy sensibles a modificar sus recorridos, pero sería un verdadero éxito que pudieran regresar por ese espacio mágico y más si se emparran las calles a la altura debida para facilitar el paso de La Borriquita, Transporte, La Cena, Candelaria, Cristo del Amor, Los Judíos por la calle Justicia, El Prendimiento, Tres Caídas, Santa Marta, Vera Cruz, Redención, Lanzada, Buena Muerte, Soledad, Cristo de las Almas, etc.".
Caracoles y cabrillas. "Después de la Feria y hasta San Juan, es costumbre para los jerezanos salir al atardecer a degustar caracoles con unas copas de fino o alguna cerveza. Se pueden poner sombrillas y mesas en el centro de la plaza del Mercado y en la plaza Belén. Puede programarse algo de música no estridente como jazz para amenizar las tardes, un tiovivo y otros cacharros para los niños".
La Fiesta de la Vendimia. "Aunque la Catedral es el lugar ideal, pueden celebrarse catas de distintas bodegas en la plaza del Mercado".
Fiesta del mosto, de la berza y el ajo campero. "Alrededor del 30 de noviembre, puede celebrarse un concurso anual del mejor mosto del año, acompañándolo con degustación de ajo caliente, berza, aceitunas aliñadas, etc.".
Atraer el turismo
En el proyecto presentado por estos ciudadanos, apuntan que lo primero que hay que confeccionar "es una historia que contar de estos lugares, un ideario, algo bonito que narrar. A continuación, crear unas rutas, que conlleven paseo por las calles, visitas a los templos y casas palacios existentes y, por último, ir creando puntos donde saborear unas copas de jerez con tapas o un espectáculo flamenco en alguna peña".
La historia de Jerez: "Hay que redactar un guion que vaya narrando, primero la historia de Tartessos, Asta Regia, su importancia, la etapa turdetana, romana y la construcción de Sherish, en la época almohade, la muralla y la frontera tras la reconquista cristiana, la construcción de los grandes templos, el gótico mudéjar, las casas de vecinos, la llegada de los grupos gitanos, las puertas de la ciudad, las bodegas, el vino (Columela) sus orígenes y la expansión de la ciudad, el tren del Trocadero, la ciudad industrial, el Jerez actual… Abrir una Oficina de Turismo con guías y visitas de grupo, posible uso de buggies eléctricos para transporte y otros medios de transportes pequeños, incluyendo coches de caballos con ruedas de goma."
Visitas a templos: "Las grandes iglesias de Santiago, San Mateo, San Juan de los Caballeros, La Merced, San Lucas, San Marcos, Las Reparadoras, además de San Dionisio, San Miguel y, por supuesto, la Cartuja, deberían estar abiertos en horario turístico y poder ser visitados como todas iglesias importantes del mundo, quizá mediante el previo pago, especialmente en el caso de la Cartuja y San Miguel, donde es necesario la asistencia de algún guía o bien audio-guías debido a su importancia monumental".
Peñas Flamencas: "Actualmente, existen varias peñas flamencas instaladas en el barrio viejo de San Mateo y su entorno, pero sería deseable que con el tiempo se fueran instalado algunas más. Estas peñas podrían tener actividades pensadas para el turismo, además de las que ya programan para sus socios. Igualmente, sería interesante que algunas empresas independientes se establecieran allí, a modo de tablaos con tapas o tabancos tipo El Pasaje, que ha demostrado que puede lograrse un éxito. Igualmente, sería deseable que Villamarta programara algunos de sus cursos o espectáculos de noche en algún lugar de este maravilloso barrio".
Circulación y transporte: "Un equipo técnico debería estudiar las dificultades que pueden producirse en el tráfico y en la posible acumulación de personas en los días de festejos propuestos en este trabajo. Damos por sentado que el tránsito de vehículos debe estar prohibido en esta zona, exceptuando los pertenecientes a los residentes con plazas de garajes, aunque podría habilitarse un lugar cercano para aparcamiento de los mismos. Este lugar medieval debe considerarse como un espacio para el paseo, para el deleite donde solo pueda accederse andando o en bicicleta. Pero pueden habilitarse pequeños autobuses eléctricos, algún tren turístico, o buggies eléctricos de hasta diez plazas para desplazar a personas con dificultades. Sí podrían entrar lógicamente vehículos de carga, descarga, ambulancias y de servicios- Estos vehículos podrían acceder a través de cuatro puertas y circuitos: a) Catedral, Barranco, Belén, San Lucas, Cabezas y plaza del Mercado, o bien Cuesta Espíritu Santo, San Ildefonso, Plaza del Mercado; b) Calle Muro, Cordobeses, plaza del Mercado; c) Ronda del Caracol, San Mateo o calle San Blas Plaza del Mercado; d) Porvera, Chancillería, San Juan, Liebre, Plaza del Mercado".
Los autores de este proyecto subrayan que esta aportación "es absolutamente desinteresada y basada únicamente en el gran amor que profesamos a la ciudad de Jerez, donde nacimos, nos criamos y hemos vivido".
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