Convocados por la Fundación Jaime González-Gordon y la Asociación de Amigos de los Alconorcales, ayer celebró en las bodegas González Byass el primer Foro Andaluz del Corcho que reunió a 150 participantes entre productores -sobre medio centenar-, empresas dedicadas a la transformación de este producto, representantes de la Administración, asociaciones del sector agrícola, sector bodeguero, empresas de consultoría y de trabajos forestales. Ante esta audiencia se desarrolló una intensa jornada en la que se ofrecieron cuatro comunicaciones, un coloquio y un networking con empresas especializadas. Las conclusiones más destacadas se resumen en la necesidad de una mayor vertebración y organización de los productores, y la puesta en marcha de acciones promocionales sobre las excelencias del tapón de corcho frente a las otras opciones existentes en el mercado que plantean una seria competencia.

Así, el objetivo central de esta acción fue favorecer el negocio en torno a un producto único y con grandes propiedades. De ellas, la más conocida es como tapón de botellas pero además deben sumarse otras aplicaciones gracias a sus propiedades como aislante término y acústico.

A lo largo de la sesión se incidió en la necesidad de vertebrar al sector, tanto productores públicos como privados, e introducir pautas de modernidad en el negocio de este producto. A priori, la organización planteó la posibilidad de convocar una feria dedicada al corcho pero un razonamiento posterior le llevó a iniciar este camino con una serie de foros que comenzaron ayer en Jerez y que seguirán cada año en las diferentes provincias corcheras de Andalucía, para, en unos cinco años, poner en marcha Feria Andaluza del Corcho. En definitiva, el foro celebrado ayer en Jerez, que ha merecido la mejor evaluación por los participantes, puso el foco en la información y formación sobre el negocio del corcho, así como favorecer el contacto entre productores y propietarios con los transformadores.

La presencia de la Asociación de Amigos de los Alcornocales ratifica la bondad medioambiental y la sostenibilidad que tiene la producción corchera para el alcornocal, ya que la mejor forma de conservar el parque, según defiende con vehemencia este colectivo, es optimizando sus recursos productivos, un aspecto que mejorándolo refuerza la conservación. La producción actual se calcula en 14.000 toneladas que se extraen de unas 80.000 hectáreas de monte alcornocal que explotan unos 500 productores públicos, como los Montes de Propio de Jerez con unas 6.000 hectáreas, y privados. El Parque de los Alcornocales ocupa 170.000 hectáreas, de donde sale el 98 por ciento de la producción de la provincia.