La federación vecinal Solidaridad ha asegurado que está viviendo con "muchísima preocupación la situación que está originando el Ayuntamiento de Jerez con la prestación del servicio público de autobuses urbanos". 

A juicio del colectivo, "es incomprensible que actualmente los vecinos nos encontremos en una situación en la que se nos ponen más obstáculos para poder desplazarnos por toda la ciudad y especialmente por el centro de la misma". Todo ello cuando, además, el transporte público "es tan necesario para la revitalización del centro de la ciudad".

Tras finalizar el estado de alarma por el coronavirus, "resulta necesario que desde la administración local se realice un esfuerzo por la búsqueda de soluciones para reflotar la economía local lo antes posible y para ello es necesario que el transporte público vuelva a prestar el servicio que prestaba antes, dinamizando la ciudad y fomentado la calidad medioambiental y su sostenibilidad, así como la reducción del uso del transporte privado".

Así las cosas, Solidaridad urge a la empresa municipal Comujesa, que gestiona la prestación del transporte urbano, a "restituir el servicio en toda su extensión ampliando el servicio que presta actualmente para volver al estado en el que se encontraba antes de la emergencia sanitaria". En este sentido, la federación recuerda que actualmente el servicio que está prestando "es muy reducido porque tiene un número menor de flota y, además, lo hace en horario de sábados añadiendo la circunstancias de que no llega a toda la zona urbana".

Por otra parte, el colectivo que preside Sebastián Peña cree que es "necesaria la colocación de marquesinas en todas las paradas para que los usuarios puedan permanecer con la comodidad suficiente para aguantar las inclemencias del tiempo y el largo tiempo de espera que ronda los 40 minutos".

Recuerda también que actualmente la empresa tiene en su cochera "una flota de 9 autobuses de gas en perfecto estado de funcionamiento que no se están utilizando para no soportar el gasto de renting que estos conllevan y, como contraprestación a estos, están usando la flota vieja de autobuses en detrimento de los usuarios".

Por último, Solidaridad señala que para abastecer a los autobuses de gas se está realizando "un recorrido extra de 60 kilómetros, yendo a Medina Sidonia para hacer la recarga de combustible que necesitan, encareciendo y haciendo más deficitario el servicio".