El empresario jerezano-roteño José María Ruiz-Mateos sufrió ayer un empeoramiento en su estado de salud al haber contraído una neumonía. Fuentes familiares confirmaron que pese a vivir una mañana "de honda preocupación" el estado del propietario de Nueva Rumasa mejoró a lo largo del día después de responder de forma positiva a los antibióticos que le fueron administrados por los servicios médicos del hospital Santa María del Puerto donde se encuentra ingresado desde el lunes de la semana pasada.

Fue en dicha jornada cuando José María Ruiz-Mateos y Jiménez de Tejada fue ingresado como consecuencia de una rotura de cadera. La misma se produjo en plena noche cuando tropezó en la vivienda donde se encuentra pasando las vacaciones en la urbanización de Vistahermosa.

La operación, apuntaron las referidas fuentes, se acometió el pasado miércoles, "la cual se desarrolló sin especiales complicaciones pues no hubo que implantar prótesis de ningún tipo, tan sólo un clavo en la zona fracturada".

Ruiz-Mateos permanece ingresado en planta, no ha sido trasladado en momento alguno a Cuidados Intensivos como llegó a especularse, y aunque "muy débil" parece responder a los tratamientos. El empresario padece multitud de patologías propias de su edad (el pasado mes de abril cumplió 84 años), entre las que se encuentra Parkinson así como problemas circulatorios que hacen aconsejable la administración del medicamento conocido como Sintrom.

En el seno de la familia Ruiz-Mateos se da por seguro que la recuperación del empresario será especialmente lenta.

"Lo que más nos asustó -señalaron fuentes de la familia- fue la falta de energía que presentaba este mañana (por ayer) ya que incluso costaba trabajo entenderle cuando hablaba". En apenas unas horas su estado clínico mejoró notablemente. "La verdad es que está peleando como un jabato", destacaron a este medio las referidas fuentes familiares. Cabe destacar que el hombre de negocios necesitó incluso de la administración de oxígeno para que pudiera respirar debidamente.