Programación Guía completa del Gran Premio de Motociclismo en Jerez

Jerez

Tres años ya en peligro de derrumbe

  • La finca ubicada entre las calles Juana Jugán y Argüelles lleva 39 meses acotada por riesgo de caída de los muros y aumentan las quejas porque Urbanismo “no hace nada”

Imagen de la finca, con la grieta y los desprendimientos en primer plano.

Imagen de la finca, con la grieta y los desprendimientos en primer plano. / Manuel Aranda

Más de tres años lleva ya acotada una finca que está ubicada haciendo esquina entre las calles Juana Jugán y Argüelles por peligro de derrumbe. Se trata de una finca con cuatro viviendas de pocos metros cuadrados y dos locales, que también son pequeños. La finca tuvo que ser acotada con unas vallas por parte de Infraestructuras cuando se agrietó la fachada y parte de ella cayó al exterior en mayo de 2018.

Desde esas fechas a las actuales lo único que se ha hecho en la finca es cortar el agua y la luz como consecuencia de las denuncias de vecinos que observaron cómo el vandalismo se apropiaba de la finca, llegándose a robar tuberías, cables de electricidad, muebles, grifos y otras muchas cosas más que se conservaban en el inmueble.

De momento lo único que se ha conseguido es que dos operarios municipales acudieran a la finca para hacer una cata en el exterior, justo en la esquina entre las calles Juana Jugán y Argüelles, pero no se ha hecho nada dentro de la finca salvo comprobar su estado.

Un año después de producirse el derrumbe ya hubo quejas de vecinos por la “lentitud” con la que, según dijeron, Urbanismo estaba llevando este asunto. Estos mismos vecinos recordaron además que a pocos metros de la zona acotada hay un colegio, el Padre Torre Silva, más conocido como Oratorio Festivo, y que por delante de las paredes de la finca pasan andando muchos niños a diario (el nuevo curso escolar ya ha comenzado).

Los techos de esas viviendas se derrumbaron en mayo de 2018 y se abrió una grieta en la fachada, circunstancia que llevó a un matrimonio, cuya vivienda colinda con la que sufrió el derrumbe de los techos y que son propietarios también de un garaje en la parte de la finca vallada que no presenta problemas de derrumbe (en la calle Argüelles ), a denunciar lo sucedido en el Ayuntamiento.

Tras esa denuncia, técnicos de Urbanismo acudieron a la finca para estudiar la gravedad de la situación y comprobaron que se había producido un derrumbe parcial del forjado de la planta baja, y confirmaron la existencia de otras muchas deficiencias en el inmueble, entre ellas la posibilidad de un derrumbe de sus muros hacia el exterior ya que, como queda dicho, se produjo una grieta importante en la fachada.

Por todos estos motivos se procedió como actuación de emergencia al vallado de la zona afectada, por la calle Argüelles como también por la calle Juana Jugán. Además, en esta última calle se tuvo que poner una señal de prohibido aparcar frente a la finca porque la valla impide la circulación de vehículos si enfrente hay coches aparcados.

El Ayuntamiento adoptó también la medida de desalojar del inmueble a un matrimonio de personas de avanzada edad que seguía residiendo en la vivienda, a los que se les buscó acomodo en una residencia de ancianos.

Urbanismo tomó hace dos años la decisión de actuar en la finca para derribar los techos y apuntalar las fachadas. Todo ello, tras los problemas que tuvo para localizar a los propietarios de la finca, personas que la abandonaron hace ya bastantes años, e incluso algunos de ellos no residen actualmente en Jerez.

Ante esta tesitura y a la vista del incumplimiento de las medidas preventivas que se ordenaron a los propietarios que sí fueron localizados, se decretó la ejecución subsidiaria de las obras de consolidación que eran necesarias, esto es, que el Ayuntamiento se encargaría de derribar los techos y apuntalar las fachadas con cargo posterior a los propietarios.

Preguntado por el estado de la tramitación, el Ayuntamiento dijo en septiembre de 2020 que “estamos en la última fase del proceso para proceder a la ejecución subsidiaria a cargo del obligado, y contratar las obras, que consistirán principalmente en apuntalar las fachadas con estabilizadores, de tal manera que se puedan dejar libres las calles para su tránsito”.

A finales del pasado mes de enero, Urbanismo dijo lo siguiente sobre la situación del inmueble: “Se está terminando el procedimiento administrativo de ejecución subsidiaria para que el Ayuntamiento pueda realizar las obras de apuntalamiento de la fachada de la finca de la calle Argüelles, para poder dejar libre la calle al tráfico de viandantes y de peatones. Se prevé que estas obras se puedan iniciar a partir de febrero”.

Pues bien, pasó febrero, pasó marzo, pasó el verano, el inmueble sigue igual y uno de los propietarios consultado por este Diario asegura que no ha recibido noticia alguna del Ayuntamiento “desde hace muchos meses”.

Mientras tanto, las quejas vecinales van en aumento porque “Urbanismo está actuando con celeridad en muchos inmuebles abandonados del centro pero con esta finca no se hace nada”.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios