Prefabricadas en Jerez, la historia interminable
Las primeras caracolas se instalaron en la ciudad hace casi un cuarto de siglo, llegando a su máximo número en el curso 2015/16 cuando alcanzaron las 43 en colegios e institutos jerezanos
Actualmente, Jerez cuenta con 12 aulas prefabricadas: Lola Flores, Almunia y Fernando Savater
El instituto de Jerez con más aulas prefabricadas de Andalucía: "Llevamos 14 años aguantando que nuestros hijos den clase en estos barracones indignos"
La historia de las aulas prefabricadas en Jerez se ha convertido en la historia interminable. Lo que en un principio fue una medida provisional, ha pasado a ser parte del día a día de muchos centros educativos, aunque en la actualidad sólo las encontramos ya, afortunadamente, en tres institutos de la ciudad. Sin embargo, no deja de ser curioso que Jerez vuelva a ser noticia, sobre todo porque a pocos meses de entrar en 2025, es hoy por hoy la ciudad que más aulas prefabricadas tiene de toda Andalucía.
La colocación de estos módulos se remonta a principios de la década del 2000, coincidiendo con un importante crecimiento de la población, que propició, ante la falta de más centros (especialmente colegios) en algunas zonas de la ciudad, la instalación de las mismas. La inauguración de nuevos colegios como el Membrillar, La Marquesa o la ampliación de La Unión, no evitó, sin embargo, que estas aulas permanecieran en los centros sino todo lo contrario, pues en apenas una década el número de prefabricadas (desde el curso 2004/05 al curso 15/16) pasó en Jerez de 16 a 43. Hasta trece centros jerezanos, entre 5 colegios y 8 institutos, llegaron a contar con prefabricadas, que por aquel entonces daban cabida a 1.355 alumnos.
Las quejas sobre el día a día en estas instalaciones no sólo se ceñían al calor, las goteras o el frío, sino también a sus malas condiciones para el estudio, ya que muchas de ellas, destinadas inicialmente a niños de Primaria, se colocaron en institutos con adolescentes, convirtiéndose en un quebradero de cabeza, por sus incomodidades, para muchos estudiantes adolescentes.
La baja natalidad que se empezó a notar a partir de 2016 hizo que en 2019 la ciudad redujera considerablemente las mismas en ese periodo de tiempo, llegándose a eliminar casi la mitad. La ampliación del CEIP San José Obrero, las obras de reforma del Romero Vargas y sobre todo la apertura del instituto Elena García Armada hizo que de las 43 existentes en 2015 se pasara a 20, coincidiendo con el inicio de curso en 2019. Durante este tiempo desaparecieron las existentes en colegios como el Arana Beato, Manuel de Falla, Tomasa Pinilla y Tartessos, el último en contar un módulo que quedó retirado ese mismo año.
Por esta razón, desde 2019 sólo se encontrarían prefabricadas en institutos, inicialmente en el Josefa de los Reyes, Asta Regia, La Granja, Almunia, Fernando Savater y Lola Flores. En este último, curiosamente, la primera reforma realizada en 2017 sólo consiguió aliviar el tema de las prefabricadas levemente, toda vez que de las 10 clases existentes hasta entonces (5 módulos) se pasó a las 8 actuales.
Hoy, recién inaugurado el curso 24-25, el IES Lola Flores mantiene esas 8 aulas y el proyecto de construcción de un nuevo edificio, que pese a ser aprobado el 19 de noviembre de 2021 con un presupuesto de 2,5 millones de euros, nada se sabe de él. En aquel momento, la Junta hablaba de que "el objetivo de la actuación es proporcionar al centro las aulas y servicios comunes y complementarios que le faltan para la impartición de cuatro líneas completas de enseñanza secundaria obligatoria, dos líneas de bachillerato, formación profesional básica (FPB) de Cocina y Restauración y un ciclo formativo de grado medio (CFGM) de Técnico en Cocina y Gastronomía. Para ello se acometerá una reorganización de todo el centro, que se halla distribuido en tres edificaciones dentro de la misma parcela, en la que también se encuentran instalados cuatro módulos prefabricados para atender la demanda de escolarización, los cuales se retirarán una vez que las obras finalicen".
Además, el proyecto en sí comprendía "un aula taller de Secundaria y nuevos espacios para bachillerato como un aula de desdoble, un laboratorio, un aula de dibujo, un aula de apoyo y refuerzo pedagógico y otra de tecnologías de la información y la comunicación. Igualmente, dispondrá de un aula polivalente y un taller para la FP de Cocina y Restauración, y un aula polivalente y dos talleres para el CFGM de Técnico en Cocina y Gastronomía. El nuevo edificio se completará con módulos de aseos para docentes y no docentes, vestuarios y cuartos para instalaciones y limpieza y basura. En el exterior del recinto se realizarán trabajos de urbanización, que alcanzarán a las pistas polideportivas, y se asfaltará la zona de estacionamiento de vehículos".
Pero actualmente, no sólo el IES Lola Flores sigue manteniendo en sus instalaciones las tan traídas y llevadas aulas prefabricadas. Existen otros dos centros que también las conservan módulos, el IES Fernando Savater y el IES Almunia. En el primero de ellos, se contabilizan dos aulas, aulas que se utilizan normalmente para desdobles, algo parecido a lo que sucede con el IES Alumunia de La Granja, donde hay otras dos aulas similares. En total, Jerez sigue contando con 12 aulas prefabricadas, un problema que a día de hoy sigue sin tener visos de solución a corto plazo.
Gobierno y oposición, el mismo problema
A lo largo de estos casi 25 años, ni PSOE ni PP han conseguido acabar con estas instalaciones a pesar de la guerra mediática habitual. En este tiempo, el cruce de reproches ha sido la nota común pero la realidad, a punto de llegar a 2025, es que Andalucía sigue contando con infinidad de aulas prefabricadas en sus centros educativos.
Las promesas y las críticas han sido, en este cuarto de siglo, una tónica constante, pero la realidad es la que es. En 2007, por ejemplo, la entonces consejera de Educación, Cándida Martínez, llegó a anunciar públicamente en el Parlamento que se eliminarían todas las caracolas; algo que no ocurrió. En el PP, cuando se encontraba en la oposición, se llegó a hablar de "chabolismo educativo", de "barracones" y de "necesitar 14 años para planificar una intervención prioritaria".
En esta historia, también llegó a intervenir Ciudadanos, durante el tiempo que gobernó en coalición con el PP. De hecho, el desaparecido Javier Imbroda llegó a comparar, a los pocos meses de estar al frente de la Consejería de Educación, las aulas prefabricadas con "barracones de Afghanistán". "Desde que soy consejero, he visitado colegios en los que parecía que entraba en la España de los años 40 y otros en los que los niños están en barracones como en un campamento militar en Afganistán".
A pesar de todo, los colegios andaluces siguen albergando instalaciones de este tipo.
También te puede interesar
Lo último
Contenido ofrecido por COITAND