Los autobuses de Linesur "sólo tienen gasoil para esta semana"

Los trabajadores de Linesur (empresa concesionaria del transporte en la zona rural) protagonizaron ayer una caravana de protesta por las principales calles del centro de la ciudad. Lo hicieron para reivindicar el pago de las nóminas que les adeuda aún la empresa como consecuencia de los impagos del Ayuntamiento. La plantilla, que partió de la estación de autobuses con cinco vehículos, pasó por la plaza de las Angustias, Corredera, plaza Esteve, calle Honda, Alameda Cristina, avenida y zona de plaza del Caballo. No obstante, antes de iniciar el recorrido, los autobuses se dirigieron al Paseo de las Delicias para mostrar su solidaridad con la plantilla de la concesionaria Acasa (de ayuda a domicilio) que ayer cortó el tráfico en la avenida de Medina Sidonia para protestar también por el impago de sus nóminas.

Pese a que la manifestación se produjo por el centro de la ciudad, lo cierto es que a la hora que tuvo lugar (a partir de las diez de la mañana) no causó grandes problemas de tráfico. Aun así, la protesta (acompañada del sonido de los cláxones en todo momento) llamó la atención de los viandantes. Algunos se quejaron del exceso de ruido, aunque otros muchos fueron comprensivos. Así, al pasar por ejemplo por la plaza Esteve, donde muchos jereznos esperaban el autobús urbano, pudieron escucharse conversaciones como ésta: "¿Ese es nuestro coche?", preguntaba una señora al ver el autobús doblar la esquina, mientras que otra le aclaraba que "no, esos son los de Linesur que no cobran". "¿Que no cobran tampoco? Pues sí que está bien la cosa", se lamentaba la primera señora.

La manifestación de ayer se produjo, además, de manera simultánea a la huelga que los trabajadores están secundando desde el pasado 29 de diciembre y que, de momento, es de carácter indefinida. El motivo no es otro que el impago de los salarios de noviembre y diciembre, así como la paga extra. La situación es, además, límite porque desde el sindicato CCOO y desde el comité de empresa ya han advertido de que Linesur tiene auténticos problemas para hacer frente al pago del combustible. Incluso, según los datos que baraja el presidente del comité, Alejandro Gómez, lo más probable es que "la empresa sólo pueda pagar combustible esta semana". Los primeros problemas, de hecho, ya se han producido esta semana cuando parte de los servicios mínimos establecidos durante la huelga no pudieron ser cumplidos debido a la avería de algunos de los vehículos ante la falta de gasoil. Algunos usuarios, sin embargo, criticaron ayer con dureza la actuación de la plantilla, asegurando "que no se están cumpliendo los servicios mínimos porque no quieren los trabajadores".

Desde el comité, sin embargo, Alejandro Gómez aclaró ayer que sí se están cumpliendo los servicios mínimos, a excepción del problema del lunes por avería. Lo que ocurre es que "la gente quiere que los coches lleguen a la misma hora, pero es imposible, antes había nueve coches dando vueltas y ayer hubo cuatro coches. Por eso, las paradas en lugar de tardar tres cuarto de horas, está tardando hora y media e incluso dos horas y algo más, por eso la gente dice que no pasan a su hora".

Gómez reconoció que la plantilla ve el futuro "muy negro", aunque "estamos abiertos al diálogo tanto con el Ayuntamiento y también con la empresa, con la que me reúno casi todos los días". A la espera de que haya alguna novedad, el presidente del comité se refirió a la falta de liquidez de la empresa para pagar el combustible, asegurando que "seguiremos trabajando hasta que podamos y cuando se acabe el gasoil nos quedaremos sentaditos porque la empresa cree que esta semana puede aguantar, pero para la próxima no sabemos que pasará". Por estos motivos, Gómez mostró la preocupación de la plantilla porque "lo peor es que no sabemos cómo va a acabar esto y los ánimos están fatal".