"Desde bien temprano aprovecho, cuando aún no hace tanto calor"

José María Gutiérrez no recuerda el día en el que empezó a trabajar entre volantes y túnicas. Era bien pequeño cuando comenzó a interesarse en el negocio familiar y decidió entonces ayudar a su padre en la labor del planchado, los tintes y la limpieza de ropa. La tintorería Pina, reconocida como la más antigua de España y de origen galo, es un negocio familiar que lleva más de 75 años en la calle Medina, número 8. Su padre la heredó y desde hace años, José María es el único responsable. Aprendió este oficio desde bien pequeño y siempre recuerda los veranos como la época en la que tienen que buscar todo tipo de trucos para evitar las altas temperaturas. "El mejor remedio es tener agua fría cerca y comenzar la jornada desde bien temprano, para así acabar cuando sean las horas más duras", explica. Pero a pesar de estos hábitos, todos los años, por estas fechas se dan olas de calor que hace que sea la peor temporada para trabajar.

A las altas temperaturas que la plancha desprende con el vapor se le une, las que estos días está haciendo en nuestra ciudad y esto para el jerezano supone el momento más duro de la jornada, comenta José. "Para combatir las altas temperaturas de estos días con el calor de la plancha, comienzo la jornada desde bien temprano, al amanecer, cuando aun no hace tanta calor. Son los meses que más madrugamos, de 6 a 11 de la mañana". Además explica que el aire acondicionado le sirve de gran ayuda, pero señala que, a la larga, es mucho mejor la ventaja de que la tintorería sea una casa antigua y el taller donde plancha, esté situado en la planta baja que tiene grandes techos, lo cual hace que esté más protegido del sol y se da una mayor sensación de frescor. Durante estos meses que son de bodas y fiestas, a pesar del sofocante calor aprovecha para adelantar trabajo. Comienza a planchar las túnicas de penitente y los trajes de flamenca para que queden listos para el próximo año.