La última bombona de butano de Jerez se vendió ayer poco después de mediodía

Ayer, concretamente a las doce y media del mediodía, se vendió en Jerez la última bombona de butano puesta a la venta. El lugar en cuestión fue el depósito que se ubica en la autovía Jerez-Los Barrios (kilómetro 2) que abastece de productos de Repsol a la población jerezana. El desabastecimiento se considera total desde ayer, después de que el stock de dicho gas se agotara, "en buena parte debido a la labor de acopio que han desarrollado muchos consumidores".

Las dos plantas que surten de butano a la provincia se ubican en Sevilla y en Algeciras. Desde que comenzó la huelga ni un solo trailer ha conseguido surtir a los depósitos ubicados en la ciudad, los cuales son regidos por Carbis, distribuidor exclusivo de Repsol para las localidades de Jerez, San José del Valle y La Barca. "En estos precisos momentos -aseguraron a este medio fuentes autorizadas de la compañía- hay un buen abasto de gas propano", combustible del que se surten restaurantes y grandes cocinas, caso de los hospitales o los comedores escolares dada su potencia calorífica.

La esperanza de los distribuidores radica en que, al igual que se hizo con las gasolinas, las escoltas policiales permitan el abastecimiento de los depósitos y que la flota, actualmente en garaje, vuelva a repartir su mercancías por las calles de Jerez. A este respecto, cabe destacar que nada menos que diecisiete vehículos se encuentran en el 'dique seco'.

Sobre el problema que ha supuesto el acopio de combustibles, trabajadores de la distribuidora Carbis destacaron que "quien se llevaba dos bombonas no ha dudado en llevarse cuatro y hasta algunas más. Si no se hubiera llevado a cabo dicho acopio en estos momentos habría butano para todo el mundo". Como buen ejemplo de la carestía de este combustible que padece la provincia, destacar que "ayer a primera hora de la tarde vinieron hasta Jerez hasta vecinos de Chiclana buscando bombonas y tuvieron que irse con las manos vacías".

Entre los problemas que hubo al comienzo de la huelga para encontrar gasoil y la amenaza de los piquetes incontrolados de camioneros, los trailers dejaron de salir de las plantas productoras y los efectos apenas han tardado cuatro días en hacerse notar con toda su fuerza.

A nivel provincial, los efectos de la huelga de transporte siguen tocando de lleno a los servicios más básicos para el ciudadano. Ayer, los almacenes de bombonas de butano daban la voz de alarma. Muchos municipios de la provincia ya no tenían botellas y, en los que aún contaban con algunas existencias, sus previsiones eran que no pasarían de hoy viernes.

Entre las poblaciones más afectadas se encontraba ayer Puerto Real. Después de tres días sin reparto por varias barriadas, los ciudadanos decidieron acudir ellos con sus vehículos hasta las oficinas en el casco urbano y hasta el almacén de depósito. A las nueve y media de la mañana, una larga cola de bombonas vacías podía verse en la acera de esta oficina a la espera de que llegaran algunas llenas. A la una y media de la tarde, ya no quedaba ninguna de ellas en las instalaciones puertorrealeñas. Desde el almacén de Repsol Butano ubicado en El Puerto (desde donde se surte a esta población y también a Puerto Real), se explicaba ayer a este Diario que, como mucho, quedaría butano hasta primera hora de hoy, ya que muchos ciudadanos se habían acercado para comprar allí mismo alguna bombona. Ciudades como Rota y Chipiona se encontraban ayer en la misma situación y en Sanlúcar, el depósito tenía la esperanza de que llegara en breve algún camión.

En San Fernando, las reservas de gas butano estaban ayer agotadas. Los pedidos a la empresa suministradora de bombonas de Repsol se acumulaban desde horas tempranas y las botellas de Cepsa se agolpaban vacías en una de las gasolineras de la ciudad de esta compañía. "Esperamos que los camiones lleguen hoy", señalaban desde la empresa de distribución de Repsol sobre la posibilidad de solucionar el problema en la misma jornada. No había, sin embargo, rotundidad en la afirmación. Dependen de cómo marche el conflicto y de si algún transporte consigue llegar a su destino. En la gasolinera de Janer, que suministra Cepsa, esperaban que durante la tarde alguna cisterna llegara para llenar sus depósitos de gasolina. Apenas quedaban unos 600 litros. La situación del gas era peor: "Las botellas están ahí vacías desde hace tres días. Muchos clientes se han acercado pero no hay nada. No sabemos cuándo podrán llegar", explicaba el dependiente. Las esperanzas están puestas en que a lo largo del día de hoy los camiones puedan surtir a los diferentes surtidores y depósitos centrales para que el reparto, al menos en parte, vuelva a reanudarse con normalidad. Vista la evolución del conflicto, todo hace indicar que la asistencia de las fuerzas del orden será absolutamente obligada. Es decir, los camiones deberán ser escoltados desde las plantas de Sevilla y Algeciras hasta los diferentes centros de distribución tal y como ocurrió en los primeros días de la huelga del transporte con los combustibles industriales.

Como ha quedado dicho, en Jerez sí hay suministro de gas propano en bombonas, si bien dichas bombonas deben contar con un contrato diferente del de gas butano, no responsabilizándose seguros ni suministradoras de los daños que pudiera provocar un accidente.