El caballo blanco de Santiago también puede ser de color negro

"Las obras de los hombres pueden

derrumbarse. Las de Dios, jamás". Con este comienzo tan contundente, José Castaño Rubiales, un enamorado de su tierra, de su historia, de su patrimonio, un caminante de calles, un hombre que no pasa 60 segundos sin que le paren a saludar..., quiere reivindicar un monumento. El caballo negro de Santiago. Breve historia del templo de Santiago del Real y Refugio de Xerez de la Frontera, un libro en el que su autor hace un repaso a los antecedentes históricos sobre lo que representó en el siglo XVI la iglesia para la población, la collación, así como un análisis del entorno, el Hospital de la Sangre, la Ermita del Calvario, la visita en 1467 de los Reyes Católicos.... Un título que fue presentado ayer en unos concurridos Claustros de Santo Domingo, y que cuenta con el prólogo del obispo de la Diócesis, José Mazuelos. Además de estos epígrafes, el libro relata "algo muy novedoso, y es que en Santiago había una imagen de una cofradía de Jerez muy conocida, y que se relacionaba con la collación de Santiago. De ella aporto datos sobre su estancia en el templo y de donde está ahora. Va a dar mucho que hablar", adelantó el autor, sin querer dar más detalles "para que la gente compre así el libro". También dejó como acertijo eso del caballo negro, en vez de blanco...

Castaño, inmerso continuamente en la historia de Jerez, confiesa que la elaboración de la obra "me ha resultado fácil por eso mismo. Y es que es un tema que me apasiona. Además, cuento con un importante archivo de historia local. No me gusta copiar lo que está escrito, sino darle mi impronta y que tenga un lenguaje para todos los públicos". Hay que destacar que la obra es benéfica (10 euros) y la recaudación irá destinada a la rehabilitación del templo. Unas obras que Castaño augura que comenzarán "en breve, porque no sólo de pan vive el hombre. El patrimonio no se puede quedar en el olvido. Seguro que las generaciones futuras nos mirarían con recelo si no recuperáramos este monumento, si no hiciéramos nada al respecto".

Una idea, la de este libro, que nació directamente de Mazuelos, "para buscar otro medio con el que conseguir recursos económicos con los que poder acometer de nuevo tan urgente y necesaria obra", además de las actividades que ya desarrolla la asociación 'Jerez Por Santiago'. A este respecto, el obispo resalta en el prólogo "la riqueza que supone enmarcar en la historia, en el arte y en la arquitectura de la parroquia de Santiago la vida de un barrio significada en algunos de sus habitantes que marcaron época en el mismo. Si bien aprecio todo el trabajo realizado por su fácil lectura, es notable la sencillez con la que se explican hechos históricos y relatos de acontecimientos que nos permiten a los lectores ajenos al tema introducirnos en ellos de forma amena".

Y aunque sin desvelar el final de la obra, hay que añadir que antiguamente "para conocer el grado de inteligencia de algunas personas, se les preguntaba: ¿De qué color era el caballo blanco de Santiago? Es evidente que para los cristianos siempre será blanco, y por muy negro que no los quieran poner...".