El ladrillo ha vuelto. 2018 está siendo el año de la confirmación de la mejoría para un sector que sufrió una resaca de proporciones bíblicas tras unos años de borrachera crediticia y escalada de precios. Ya en junio, el Ministerio de Fomento dio a conocer los datos de ventas de viviendas en el primer cuatrimestre confirmándose uno de los mejores arranques de los últimos años. Y ahora se ratifica esta recuperación del sector con el volumen de viviendas que ya cuenta con la licencia municipal para su construcción con unos registros muy superiores a las del año precedente. Según los datos aportados por la Delegación de Urbanismo, hasta el pasado día 13 se había dado permiso a 281 viviendas . La cifra es destacable porque no solo duplica a las concedidas en 2017 sino que también supera a la suma de las que se autorizaron en ese ejercicio con el anterior (en 2016 se dio permiso a 117 y en 2017 a 138).

La junta de gobierno local dio el visto bueno el pasado jueves a una nueva promoción, la segunda fase de un conjunto de viviendas promovidas por el Grupo Jove que bajo la denominación comercial 'Residencial Plaza Norte' en el Arroyo del Membrillar, en las inmediaciones de la avenida Caballero Bonald. Esta nueva fase está conformada por 48 viviendas, que se sumarán a las otras 48 ya autorizadas meses atrás y que ya están en fase construcción. En este enclave se prevén un total de 184 pisos.

Estamos asistiendo a un repunte sostenible y asumible del sector de la construcción"

En torno a un centenar de las viviendas autorizadas en este año han recibido el beneplácito municipal durante el verano que está a punto de acabar. Tal y como se apunta en la información facilitada por la Delegación de Urbanismo, se dio vía libre a una promoción de ocho viviendas en la avenida de Europa y otra de 21 en la avenida de Nazaret, a las que se suma ahora la segunda fase del Arroyo de Membrillar. Previamente, se dio permiso a 44 inmuebles en la avenida Tío Pepe, a 18 en el sector El Carrascal (junto al antiguo complejo bodeguero de Croft), a otros 22 den la avenida de Europa y otros 52 en El Pelirón.

Claro está, se está lejos de los niveles que se alcanzaron en los años de 'boom' inmobiliario donde superar las 2.000 autorizaciones era lo habitual. Ahora bien, desde 2013, año en el que se tocó suelo con apenas 20 inmuebles autorizados, se ha ido poco a poco remontando.

Otra estadística que confirma que el sector ha entrado en una fase de crecimiento sostenido la da el Consejo General del Notariado con el número de compraventas de viviendas registradas. Así, entre enero y abril se contabilizó la transacción de unos 662 inmuebles -en esta cifra están tanto las viviendas de nueva construcción como las de segunda mano-, 73 más que en el mismo periodo de 2017.

En declaraciones a este periódico, la alcaldesa, Mamen Sánchez, indicó que estas estadísticas ratifican que estamos "asistiendo a un repunte sostenible y asumible del sector de la construcción que a todos nos alegra por la repercusión que tiene en el desarrollo racional de la ciudad y que, en cualquier caso, debe de estar muy alejado de la irracionalidad de la lamentable explosión del sector inmobiliario de la pasada década, que nos llevó a la trágica explosión de la ya tristemente famosa burbuja". En este sentido, la regidora afirmó que se está apostando por el desarrollo de suelos residenciales que estaban paralizados "dentro de zonas que completen la ciudad consolidada y no propiciando nuevos crecimientos que expandan el suelo que hacen más difícil su mantenimiento".