El covid ha costado la vida de 407 personas en Jerez y 523 en su distrito sanitario, las tres últimas notificadas este martes por la Consejería de Salud y Familias con el nuevo sistema de vigilancia del virus ya en vigor y por el que únicamente se informa dos veces por semana (martes y viernes) de la evolución de los casos.

El nuevo sistema, del que desaparecen los casos leves y asintomáticos para monitorizarse sólo los graves y personas vulnerables (mayores, embarazadas e inmunodeprimidos) o que trabajan en ámbito vulnerables (sanitarios y sociosanitarios), acelera el descenso de la incidencia acumulada en 14 días, que se reduce en 70 puntos desde el viernes, para bajar ya de los 212 casos en el municipio jerezano.

La tasa covid también se establece en 212 casos en el distrito sanitario, que registra un descenso algo inferior al de Jerez, en concreto de medio centenar de puntos respecto al parte anterior.    

Baja la incidencia y también bajan los casos activos -en gran parte motivado por la supresión de los casos menos graves, hay que insistir-, de los que quedan en Jerez menos de 700 tras un aumento de 186 curados frente a los 66 nuevos positivos registrados desde el viernes.

Lo mismo ocurre en el distrito Jerez-Costa Noroeste, donde se computan poco más de un millar de casos activos este martes, gracias a las 234 altas de pacientes que han superado la enfermedad en los últimos cuatro días frente a los 123 contagios del mismo periodo.

A los tres fallecidos de Jerez, los únicos notificados en el área sanitaria. se suman nueve hospitalizaciones, con lo que los ingresos en planta de los centros hospitalarios del distrito desde el inicio de la pandemia ascienden a 2.246, a los que cabe añadir otros 207 en UCI.

La situación, por tanto, se estabiliza, no tanto porque se hayan reducido los contagios y el riesgo de transmisión real, sino por la entrada en la nueva etapa covid, la de transición hacia un sistema de vigilancia centinela, como el de la gripe, en el que muchos de los indicadores que hasta ahora medían el covid pasan a un segundo plano para centrarse en los casos graves y en la presión asistencial.