Los embalses de la zona, la otra cara de la moneda ante la llegada de precipitaciones

Nunca llueve a gusto de todos. El popular refrán viene estos días como anillo al dedo a Jerez con la situación meteorológica que puede afectar a la Magna Mariana del próximo sábado 12 de octubre. Así, mientras el mundo cofrade, y el sector del turismo, al que indirectamente afecta este evento, mira con recelo los pronósticos del tiempo, en el campo, la previsión de precipitaciones se observa desde el optimismo, especialmente por la situación en la que se encuentran a día de hoy los embalses de la provincia.

Actualmente, los niveles de agua embalsada en los diez pantanos de la provincia de Cádiz apenas supera el 21%, una cifra preocupante si tenemos en cuenta que, en el caso de Jerez, la ciudad acumula cinco años consecutivos con déficit de lluvia. Hay que recordar que en Jerez la media habitual de precipitaciones durante un año es de 540, cifra que no se supera desde 2018 cuando se llegaron a los 679 litros. Desde entonces, siempre se ha estado por debajo de dicho umbral, siendo especialmente secos los años 2019, cuando sólo cayeron 219 litros y el pasado 2023, con 316.

A día de hoy, 2024 ha superado esta cifra, pues en lo que va de año se han recogido 355 litros, si bien es cierto que todavía se encuentran lejos de la media habitual, aunque por otro lado quedan meses que históricamente suelen ser bastante copiosos.

En cuanto a los embalses de la zona destaca el escaso 17% al que se encuentra el pantano de Guadalcacín, el más grande de la provincia con 800 hectómetros cúbicos de capacidad, a un raquítico 10% está en estos momentos el de Zahara, y a un 22% el de Bornos, otros de los más grandes de Cádiz, pues pueden acumular 222 y 200 hectómetros cúbicos de capacidad. Mejor cara presenta el de Los Hurones, que se encuentra al 63% de su capacidad y el de Arcos, el segundo más pequeño de la zona, que está al 91%.

Las previsiones de lluvia de cara al fin de semana, con la llegada de la borrasca Berenice, apuntan a más de treinta litros en la jornada del viernes y 90 en la jornada del sábado, cantidades que a buen seguro servirán para recuperar algo de capacidad en los embalses.