José Manuel Rosso | Jefe del Parque de Bomberos de Jerez

“Salvar una vida te da años de energía para seguir adelante”

  • Es el máximo responsable del Consorcio en Jerez desde hace 12 años

  • “Nuestros mayores nunca se nos olvidan. Trabajaron con lo mínimo”

José Manuel Rosso, el pasado viernes en el Parque de Bomberos de Martín Ferrador en Jerez.

José Manuel Rosso, el pasado viernes en el Parque de Bomberos de Martín Ferrador en Jerez. / Miguel Ángel González

José Manuel Rosso Cote tiene 48 años y es el jefe del Parque de Bomberos de Jerez. En la actualidad suma ya casi 30 años en la profesión, un oficio al que accedió tras conocer a una chavala que hoy en día es su esposa. “La vocación me vino a través de mi novia, que hoy es mi mujer. Ella era y es familia de bomberos y fue gracias a ella que ese interés me entró en el cuerpo. Y aquí estamos”.

A lo largo de los años José Manuel Rosso ha pasado por numerosos destinos en el Consorcio Provincial Contraincendios. Llegó al parque de Jerez en 2008. Conoció las antiguas instalaciones del parque de bomberos del Retiro, en Delicias, de rebote. Jamás trabajó allí. “Por entonces estaba en Sanlúcar, todavía hay quienes viven cerca de aquel edificio. La construcción del nuevo Parque de Jerez, mucho más grande y dotado, supuso un antes y un después en el desempeño de nuestro trabajo”.

Las desgracias que vives en tu trabajo te duelen en el alma pero no te las puedes llevar a casa”

A lo largo de los años pasó como bombero por Sanlúcar, Cádiz, Los Barrios, La Línea y Algeciras. Como ha quedado dicho fue en 2008 cuando se incorporó a la plantilla de Martín Ferrador. Allí se hizo cargo de cinco brigadas de doce bomberos cada una de ellas. “Tengo la inmensa suerte de disfrutar de un equipo de compañeros de una calidad excepcional tanto como profesionales como por buenas personas”.

Si algo caracteriza al trabajo de los bomberos es que los turnos son intensos. Dispuestos a lo que salga, sometidos al destino, a lo que surja... “Cada una de las cinco brigadas afronta turnos de 24 horas y tras completar tres jornadas de trabajo en una sola jornada proceden a descansar cuatro días”.

Al ser el máximo responsable su trabajo es distinto. “Ni mucho menos estoy sometido a turnos. Debo estar localizable las 24 horas del día lo que implica que no se desconecta jamás”.

Rosso, ante distinciones y cascos en el Parque de Jerez. Rosso, ante distinciones y cascos en el Parque de Jerez.

Rosso, ante distinciones y cascos en el Parque de Jerez. / Miguel Ángel González

El peor momento que viví fue hace años en La Línea. Un bebé murió en su cuna. Fue muy duro”

Si algo está claro es que conforme la democracia fue avanzando sus bomberos lo fueron haciendo de forma pareja consiguiendo mejores medios. “A nivel de medios y de preparación hemos avanzado muchísimo, si bien ninguno de nosotros olvida el trabajo de nuestros mayores, los antiguos bomberos, que le echaban muchísimo tiempo y tiraban de recursos de todo tipo para solucionar los grandes problemas que se les planteaban en su ejercicio profesional”. A este respecto apunta que el famoso dicho ‘Tienes cosas de bombero’ hace referencia precisamente a esa capacidad de improvisar, de solucionar graves problemas “sin tener los medios adecuados a tu alcance. Y lo lograban”, destaca a la vez que recuerda que “las brigadas por entonces estaban compuestas por profesionales de todo tipo, desde fontaneros hasta albañiles”.

Para ser bombero hay que tener fuerza física, pero más importante es la fuerza mental”

A lo largo de la vida de un bombero siempre, de forma indefectible, hay momentos duros, instantes que se desearía borrar de la memoria pero que resulta imposible. José Manuel Rosso, a este respecto, señala que uno de sus peores momentos lo vivió en 1992. “Fue en Los Barrios, hubo un incendio y un bebé murió en la cuna. Cuando las víctimas son niños te afecta en la mismísima alma”. ¿Cómo sobrellevarlo? “Esos recuerdos siempre van a estar ahí. Debes lograr convivir con ellos, te lo tienes que tomar como lo que es, como una desgracia, que diste el máximo por evitarlo pero no pudiste conseguirlo. Eso sí, es esencial que no te lo lleves a casa”.

Al igual que hay desgracias que marcan hay trabajos que, como dice José Manuel Rosso, “te dan fuerzas para aguantar durante años”. Ese fue justamente el caso de “un incendio en Jerez hará cosa de una década. Se trató de dos niños atrapados y conseguimos localizarlos en la humareda y los sacamos con vida. Cuando salen bien las cosas las pilas se recargan para tirar adelante de forma automática. Aún lo recuerdo, fue por Las Quinientas, por detrás de lo que en Jerez conocemos aún como Continente Sur”.

La vocación de bombero sigue estando presente en las mentes de multitud de jóvenes. Los consejos de este veterano son claros. “Lo primero que necesita esta profesión es que tiene que gustar, hay que tener vocación. Después está la preparación física, que es tan importante como la fuerza mental, la capacidad de estar preparado. Si eres bomberos debes estar siempre preparado, y tranquilo. Aunque hayas mucho lío, mucho jaleo, debes tener la cabeza fría siempre para actuar de forma eficiente”.

Por cierto, para los amantes de la cocina, entre los bomberos siempre hay un par de ellos que cocinan maravillosamente bien. Sus comidas son harto conocidas por lo sabrosas que son. “No falla, siempre tenemos dos cocinilllas por turno”, sonría Rosso.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios