Programación Guía completa del Gran Premio de Motociclismo en Jerez

Guerra de Ucrania

La espiral de precios salpica a los churros

Manuel Jiménez, en el puesto de churros de Doña Blanca con el listado de los nuevos precios al fondo.

Manuel Jiménez, en el puesto de churros de Doña Blanca con el listado de los nuevos precios al fondo.

La electricidad se ha encarecido un 80% en lo que va de año, los combustibles un 30% y algunos alimentos registran incrementos que en algunos casos superan el 100%. En resumidas cuentas, el coste de la vida se ha disparado a raíz de la invasión rusa de Ucrania, con la inflación por las nubes que hace estragos en los ya castigadas economías domésticas.

Las compras compulsivas de determinados productos ante el temor a su escasez, caso de los carburantes en las últimas horas en Jerez, donde se han registrado largas colas en las gasolineras para llenar los depósitos, derivan en una escalada de precios que alcanza a muchos productos y alimentos, caso de los churros, que también se han visto salpicados por esta espiral.

"Los clientes están que trinan, pero es lo que hay con el precio al que se ha puesto todo, la luz, el aceite de girasol, la harina, el papel, los autónomos...", explica Manuel Jiménez Reyes churrero de los puestos de la calle Doña Blanca, donde el mínimo que se despacha ha pasado de 1 a 1,50 euros, es decir, un 50% de incremento.

Clientes en el puesto de churros de Manuel Jiménez junto a la plaza de abastos. Clientes en el puesto de churros de Manuel Jiménez junto a la plaza de abastos.

Clientes en el puesto de churros de Manuel Jiménez junto a la plaza de abastos.

Jiménez atiende a la clientela entre quejas por una subida que, asegura, "tenía que haberse aplicado hace muchos años", porque "los churros en Jerez estaban más baratos que en ningún sitio", por lo que deja entrever que la corrección actual no cubre el incremento de costes por la guerra.

El kilo de churros se vende desde principios de mes a 10 euros frente al precio de 8 euros que ha estado en vigor los últimos años. De momento, señala el churrero, no hay previstas nuevas subidas del precio de venta al público de los churros, entre otros motivos, porque "si suben más tendría que cerrar".

Según Jiménez, el saco de 25 kilos de harina se ha encarecido en cinco euros, desde 16,40 a 21,20 euros, mientras que la garrafa de cinco litros de aceite de girasol, que antes compraba a 4,95 euros cuesta ahora 12,40, es decir, casi siete euros y medio más, "y eso que el aceite que se vende ahora lo tenían en stock, por lo que no tiene sentido que le apliquen esta subida", pero así es la ley de la oferta y la demanda.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios