La historia de Chema Rodríguez es del camino de la superación. Su trayectoria, en la que figuran dos medallas de plata en los Juegos Paralímpicos se va a ver reconocida en esta edición de los galardones 'Ciudad de Jerez' con el Premio Joven. Su padre y entrenador, José Rodríguez, se muestra encantado con esta concesión que les hace seguir adelante de cara a las próximas competiciones que van a retomar en unas semanas.

"Estamos muy contentos con el premio porque el pueblo ha cumplido con él. Chema está muy contento y orgulloso porque supone un reconocimiento a un trabajo que se hace durante todo el año y durante muchos años".

El campeón de boccia entrena a diario, aunque ahora se encuentra en un 'parón técnico' tras cinco duros meses de entrenos durante varias horas. Por eso, quizá quedaron un poco decepcionados cuando tras regresar con la presea de plata de Pekín 2008 no encontraron a nadie del Ayuntamiento que los recibiera en el aeropuerto. "Para nosotros fue un pequeño palo que no hubiera nadie para darle la bienvenida". Actualmente, Chema disfruta cada día yendo al centro de Upace y luego en casa de su abuelo con todos los animales que tiene, su otra pasión aparte de la boccia.

El premio que se le ha otorgado no es sólo como atleta, sino como persona, porque Rodríguez sabe ganarse la simpatía y el afecto de todo el que lo conoce. Lleva once años compitiendo en el más alto nivel de boccia y ocupando los primeros puestos en campeonatos internacionales y nacionales y eso pese a que su familia corre con esos gastos. Aún guarda en la retina el emocionante recuerdo de la última Paralimpiada donde incluso pudo celebrar en suelo chino su vigésimo octavo cumpleaños.

En poco tiempo Chema empezará la liga. Luchará por estar entre los primeros. Con este premio el esfuerzo que hace a diario "merece la pena", dice su padre.