La alcaldesa Pilar Sánchez y el obispo Juan del Río visitaron ayer también las obras de la iglesia de San Dionisio que se iniciaron hace apenas un mes porque, según explicó el arquitecto Emilio Yanes, "hemos tenido un tiempo de ajuste bastante largo, pero las cuatro columnas más dañadas están ya enfundadas, con lo cual estamos seguros en el interior de la iglesia, porque hace dos meses no habríamos podido entrar aquí. Los cuatro pilares estaban absolutamente destrozados, reventados. Se podían sacar los sillares con la mano, pero ya se ha rellenado con escayola endurecida el espacio que queda entre la funda y los pilares y vamos a comenzar el tratamiento". Está previsto que la obra esté acabada antes de final de año y no necesitará ninguna fase más, sólo el embellecimiento que se le pueda hacer, "porque no tiene nada que ver con la estabilidad y con la resistencia del edificio".

Las obras de San Dionisio y Santiago las está realizando la empresa Cintra. "Cuando a mí me llamaron -explicó el arquitecto- había una actuación de rehabilitación que se estaba llevando a cabo por fuera, en las cubiertas, pero no se había entrado en el edificio, cuyo estado era pésimo y después ha ido degenerando. Cuando hace dos meses han estado aquí para empezar la obra los daños habían aumentado de forma generalizada e incluso habían salido algunas fisuras que antes no había, aunque eso es normal".

Yanes dijo asimismo que "aquí no hay problemas generales de estabilidad, como ocurre en Santiago, pero sí de cimentación, y también un problema de descomposición de la piedra, la calcarenita". También se refirió a los rellenos interiores de las columnas, "que no son de tan mala calidad como los de Santiago, pero sin embargo la piedra exterior es peor". La obra, con un coste de 890.000 euros, ha sido pagada por el Ayuntamiento.